Romanos 11:34-36
Romanos 11:34-36 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
«¿Quién ha conocido la mente del Señor o quién ha sido su consejero?». «¿Quién primero dio algo a Dios, para que luego Dios le pague?». Porque todas las cosas proceden de él, y existen por él y para él. ¡A él sea la gloria por siempre! Amén.
Romanos 11:34-36 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Como dice la Biblia: «¿Sabe alguien cómo piensa Dios? ¿Puede alguien darle consejos? »¿Puede acaso alguien regalarle algo a Dios, para que él esté obligado a darle algo a cambio?» En realidad, todo fue creado por Dios; todo existe por él y para él. Así que, ¡alabemos a Dios por siempre! Amén.
Romanos 11:34-36 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Porque ¿quién ha entendido la mente del Señor? ¿O quién ha sido su consejero? ¿O quién le dio a él primero, para que él tenga que devolverlo? Ciertamente, todas las cosas son de él, y por él, y para él. ¡A él sea la gloria por siempre! Amén.
Romanos 11:34-36 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Pues «¿quién conoce la mente del Señor? ¿Quién podrá darle consejos? ¿Quién le ha dado algo antes, para que él tenga que devolvérselo?» Porque todas las cosas vienen de Dios, y existen por él y para él. ¡Gloria para siempre a Dios! Amén.
Romanos 11:34-36 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Porque ¿quién entendió la mente del Señor? ¿O quién fue su consejero? ¿O quién le dio a él primero, para que le fuese recompensado? Porque de él, y por él, y para él, son todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos. Amén.
Romanos 11:34-36 La Biblia de las Américas (LBLA)
Pues, ¿QUIéN HA CONOCIDO LA MENTE DEL SEÑOR?, ¿O QUIéN LLEGó A SER SU CONSEJERO?, ¿O QUIéN LE HA DADO A ÉL PRIMERO PARA QUE SE LE TENGA QUE RECOMPENSAR? Porque de Él, por Él y para Él son todas las cosas. A Él sea la gloria para siempre. Amén.
Romanos 11:34-36 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Pues, ¿quién puede conocer los pensamientos del SEÑOR? ¿Quién sabe lo suficiente para aconsejarlo? ¿Y quién le ha entregado tanto para que él tenga que devolvérselo? Pues todas las cosas provienen de él y existen por su poder y son para su gloria. ¡A él sea toda la gloria por siempre! Amén.