Salmos 9:1-10
Salmos 9:1-10 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Quiero alabarte, SEÑOR, con todo el corazón, y contar todas tus maravillas. Quiero alegrarme y regocijarme en ti y cantar salmos a tu nombre, oh Altísimo. Mis enemigos retroceden; tropiezan y perecen ante ti. Porque tú me has hecho justicia, me has vindicado; tú, Juez justo, ocupas tu trono. Reprendiste a los paganos, destruiste a los malvados; para siempre borraste su memoria. Ruina sin fin cayó sobre el enemigo; arrancaste de raíz sus ciudades y hasta su recuerdo se ha desvanecido. Pero el SEÑOR reina por siempre; para emitir juicio ha establecido su trono. Juzgará al mundo con justicia; gobernará a los pueblos con equidad. El SEÑOR es refugio de los oprimidos; es su baluarte en momentos de angustia. En ti confían los que conocen tu nombre, porque tú, SEÑOR, jamás abandonas a los que te buscan.
Salmos 9:1-10 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
1-2 (2-3) Dios mío, Dios altísimo, yo quiero alabarte de todo corazón. Quiero expresarte mi alegría; ¡quiero cantarte himnos y hablar de tus maravillas! 3-4 (4-5) Tú eres un juez justo: juzgaste mi caso y me declaraste inocente. Por ti mis enemigos huyen, tropiezan y son destruidos. 5 (6) Reprendiste a los pueblos que no te adoran; destruiste a esos malvados, ¡y nadie volvió a recordarlos! 6 (7) Para siempre cayó la desgracia sobre nuestros enemigos; dejaste sin gente sus ciudades, y ya nadie se acuerda de ellos. 7 (8) Dios mío, tú reinas para siempre, estás sentado en tu trono, y vas a dictar la sentencia. 8 (9) Juzgarás a los pueblos del mundo con justicia y sin preferencias. 9-10 (10-11) Tú, Dios mío, proteges a los que son maltratados y los libras de la angustia.
Salmos 9:1-10 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Señor, te alabaré de todo corazón y hablaré de todos tus portentos. Por ti me alegraré, oh Dios altísimo, y cantaré alabanzas a tu nombre. Ante ti, mis enemigos huyen; ruedan por el suelo y perecen. Tú eres un juez justo, y desde tu trono defiendes mi causa y me haces justicia. Sometes a las naciones, destruyes a los malvados, y borras para siempre su memoria. Mis adversarios se han desvanecido; han quedado destruidos para siempre. Con ellos se borró el recuerdo de las ciudades que tú destruiste. Pero tú, Señor, permaneces para siempre, y tienes preparado tu tribunal de justicia. Con justicia juzgarás al mundo; con rectitud juzgarás a las naciones. Tú, Señor, eres el refugio de los pobres; eres su amparo en momentos de angustia. En ti confían los que conocen tu nombre, porque tú, Señor, proteges a los que te buscan.
Salmos 9:1-10 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
1 (2) Oh Señor, quiero alabarte con todo el corazón y contar tus muchas maravillas. 2 (3) Oh Altísimo, por ti quiero gritar lleno de alegría; ¡quiero cantar himnos a tu nombre! 3 (4) Mis enemigos huyen delante de ti; caen y mueren. 4 (5) Tú eres juez justo: te has sentado en tu trono, para hacerme justicia. 5 (6) Has reprendido a los paganos, has destruido a los malvados, ¡has borrado su recuerdo para siempre! 6 (7) El enemigo ha muerto, y con él han muerto sus ciudades; tú las destruiste, y no quedó de ellas ni el recuerdo. 7 (8) Pero el Señor es Rey por siempre; ha afirmado su trono para el juicio: 8 (9) juzgará al mundo con justicia, dictará a los pueblos justa sentencia. 9 (10) El Señor protege a los oprimidos; él los protege en tiempos de angustia. 10 (11) Señor, los que te conocen, confían en ti, pues nunca abandonas a quienes te buscan.
Salmos 9:1-10 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Te alabaré, oh Jehová, con todo mi corazón; Contaré todas tus maravillas. Me alegraré y me regocijaré en ti; Cantaré a tu nombre, oh Altísimo. Mis enemigos volvieron atrás; Cayeron y perecieron delante de ti. Porque has mantenido mi derecho y mi causa; Te has sentado en el trono juzgando con justicia. Reprendiste a las naciones, destruiste al malo, Borraste el nombre de ellos eternamente y para siempre. Los enemigos han perecido; han quedado desolados para siempre; Y las ciudades que derribaste, Su memoria pereció con ellas. Pero Jehová permanecerá para siempre; Ha dispuesto su trono para juicio. Él juzgará al mundo con justicia, Y a los pueblos con rectitud. Jehová será refugio del pobre, Refugio para el tiempo de angustia. En ti confiarán los que conocen tu nombre, Por cuanto tú, oh Jehová, no desamparaste a los que te buscaron.
Salmos 9:1-10 La Biblia de las Américas (LBLA)
Alabaré al SEÑOR con todo mi corazón. Todas tus maravillas contaré; en ti me alegraré y me regocijaré; cantaré alabanzas a tu nombre, oh Altísimo. ¶Cuando mis enemigos retroceden, tropiezan y perecen delante de ti. Porque tú has mantenido mi derecho y mi causa; te sientas en el trono juzgando con justicia. Has reprendido a las naciones, has destruido al impío, has borrado su nombre para siempre jamás. El enemigo ha llegado a su fin en desolación eterna, y tú has destruido sus ciudades; su recuerdo ha perecido con ellas. ¶Pero el SEÑOR permanece para siempre; ha establecido su trono para juicio, y juzgará al mundo con justicia; con equidad ejecutará juicio sobre los pueblos. Será también el SEÑOR baluarte para el oprimido, baluarte en tiempos de angustia. En ti pondrán su confianza los que conocen tu nombre, porque tú, oh SEÑOR, no abandonas a los que te buscan.
Salmos 9:1-10 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Te alabaré, SEÑOR, con todo mi corazón; contaré de las cosas maravillosas que has hecho. Gracias a ti, estaré lleno de alegría; cantaré alabanzas a tu nombre, oh Altísimo. Mis enemigos retrocedieron, tambalearon y murieron cuando apareciste. Pues has juzgado a mi favor; desde tu trono juzgaste con imparcialidad. Reprendiste a las naciones y destruiste a los malvados; borraste sus nombres para siempre. El enemigo está acabado; quedó en ruinas eternas. Las ciudades que arrancaste de raíz ya pasaron al olvido. Pero el SEÑOR reina para siempre; desde su trono lleva a cabo el juicio. Juzgará al mundo con justicia y gobernará a las naciones con imparcialidad. El SEÑOR es un refugio para los oprimidos, un lugar seguro en tiempos difíciles. Los que conocen tu nombre confían en ti, porque tú, oh SEÑOR, no abandonas a los que te buscan.