Salmos 80:12-19
Salmos 80:12-19 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
¿Por qué has derribado sus muros? ¡Todos los que pasan le arrancan uvas! Los jabalíes del bosque la destruyen, los animales del campo la devoran. ¡Vuélvete a nosotros, oh Dios de los Ejércitos! ¡Asómate a vernos desde el cielo y brinda tus cuidados a esta vid! ¡Es la raíz que plantaste con tu diestra! ¡Es el vástago que has criado para ti! Tu vid está derribada, quemada por el fuego; a tu reprensión perece tu pueblo. Bríndale tu apoyo al hombre de tu diestra, al hijo de hombre que has criado para ti. Entonces no nos apartaremos de ti; reavívanos e invocaremos tu nombre. ¡Restáuranos, SEÑOR Dios de los Ejércitos! Haz resplandecer tu rostro sobre nosotros, y sálvanos.
Salmos 80:12-19 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
12-14 (13-15) Dios del universo, ¿por qué dejaste a tu vid sin tu protección? Todos nuestros enemigos pasan y nos hacen daño; ¡nos devoran como fieras! ¡Deja ya de castigarnos! ¡Asómate desde el cielo y muéstranos tu cariño! 15 (16) ¡Tú mismo nos plantaste! ¡Tú mismo nos cuidaste! 16 (17) El enemigo nos ha derrotado; le ha prendido fuego a nuestras ciudades. ¡Repréndelos, destrúyelos! 17 (18) Pero no dejes de apoyar al pueblo en quien confías, al pueblo que has fortalecido; 18 (19) así, no nos apartaremos de ti. ¡Danos vida, y te alabaremos! 19 (20) Dios nuestro, Señor del universo, ¡cambia nuestra triste situación! ¡Muéstranos tu bondad y sálvanos!
Salmos 80:12-19 Reina Valera Contemporánea (RVC)
¿Por qué derribaste sus cercas? ¡Todos los que pasan le arrancan uvas! ¡Los jabalíes le hacen destrozos! ¡Las bestias salvajes la devoran! Dios de los ejércitos, ¡vuélvete a nosotros! Desde el cielo dígnate mirarnos, y reconsidera; ¡ven y ayuda a esta viña! ¡Es la viña que plantaste con tu diestra! ¡Es el renuevo que sembraste para ti! ¡La han cortado! ¡Le han prendido fuego! ¡Déjate ver, y repréndelos, para que perezcan! Pero posa tu mano sobre tu hombre elegido, sobre el hombre al que has dado tu poder. Así no nos apartaremos de ti. Tú nos darás vida, y nosotros invocaremos tu nombre. Señor, Dios de los ejércitos, ¡restáuranos! ¡Haz resplandecer tu rostro, y seremos salvados!
Salmos 80:12-19 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
12 (13) ¿Por qué has derribado su cerca, dejando que le arranquen uvas los que van por el camino? 13 (14) El jabalí la destroza; ¡los animales salvajes la devoran! 14 (15) Dios todopoderoso, regresa, por favor; mira atentamente desde el cielo y ten consideración de esta vid, 15 (16) de la vid que tú mismo plantaste, del retoño que tú mismo afirmaste. 16 (17) Destruye con tu furor a quienes la cortan y la queman; 17 (18) pero ayuda al hombre que has escogido, al retoño de hombre que tú mismo afirmaste, 18 (19) y nunca más nos apartaremos de ti. ¡Danos vida, y solo a ti te invocaremos! 19 (20) Oh Señor, Dios todopoderoso, ¡haz que volvamos a ser lo que fuimos! ¡Míranos con buenos ojos y estaremos a salvo!
Salmos 80:12-19 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
¿Por qué aportillaste sus vallados, Y la vendimian todos los que pasan por el camino? La destroza el puerco montés, Y la bestia del campo la devora. Oh Dios de los ejércitos, vuelve ahora; Mira desde el cielo, y considera, y visita esta viña, La planta que plantó tu diestra, Y el renuevo que para ti afirmaste. Quemada a fuego está, asolada; Perezcan por la reprensión de tu rostro. Sea tu mano sobre el varón de tu diestra, Sobre el hijo de hombre que para ti afirmaste. Así no nos apartaremos de ti; Vida nos darás, e invocaremos tu nombre. ¡Oh Jehová, Dios de los ejércitos, restáuranos! Haz resplandecer tu rostro, y seremos salvos.
Salmos 80:12-19 La Biblia de las Américas (LBLA)
¿Por qué has derribado sus vallados, de modo que la vendimian todos los que pasan de camino? El puerco montés la devora, y de ella se alimenta todo lo que se mueve en el campo. ¶Oh Dios de los ejércitos, vuelve ahora, te rogamos; mira y ve desde el cielo, y cuida esta vid, la cepa que tu diestra ha plantado y el vástago que para ti has fortalecido. Está quemada con fuego, y cortada; ante el reproche de tu rostro perecen. Sea tu mano sobre el hombre de tu diestra, sobre el hijo de hombre que para ti fortaleciste. Entonces no nos apartaremos de ti; avívanos, e invocaremos tu nombre. Oh SEÑOR, Dios de los ejércitos, restáuranos; haz resplandecer tu rostro sobre nosotros y seremos salvos.
Salmos 80:12-19 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Pero ahora, ¿por qué has derribado nuestras murallas de modo que todos los que pasan pueden robarse nuestros frutos? Los jabalíes del bosque los devoran, y los animales salvajes se alimentan de ellos. Te suplicamos que regreses, oh Dios de los Ejércitos Celestiales. Observa desde los cielos y mira nuestro aprieto. Cuida de esta vid que tú mismo plantaste, este hijo que criaste para ti. Somos cortados y quemados por nuestros enemigos; que perezcan al ver tu ceño fruncido. Fortalece al hombre que amas, al hijo que elegiste. Entonces jamás volveremos a abandonarte. Revívenos para que podamos invocar tu nombre una vez más. Haznos volver a ti, oh SEÑOR Dios de los Ejércitos Celestiales; haz que tu rostro brille sobre nosotros. Solo entonces seremos salvos.