Salmos 40:1-4
Salmos 40:1-4 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Puse en el SEÑOR toda mi esperanza; él se inclinó hacia mí y escuchó mi clamor. Me sacó de la fosa fatal, del lodo y del pantano; puso mis pies sobre una roca, y me plantó en terreno firme. Puso en mis labios un cántico nuevo, un himno de alabanza a nuestro Dios. Al ver esto, muchos tuvieron miedo y pusieron su confianza en el SEÑOR. Dichoso quien pone su confianza en el SEÑOR y no recurre a los soberbios ni a los que se pierden tras la mentira.
Salmos 40:1-4 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
1 (2) Toda mi esperanza la tengo puesta en Dios, pues aceptó atender mis ruegos. 2 (3) Mi vida corría peligro, y él me libró de la muerte; me puso sobre una roca, me puso en lugar seguro. 3 (4) Me enseñó un nuevo himno para cantarle alabanzas. Muchos, al ver esto, se sintieron conmovidos y confiaron en mi Dios. 4 (5) Dios bendice a los que en él confían, a los que rechazan a los orgullosos que adoran dioses falsos.
Salmos 40:1-4 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Yo puse mi esperanza en el Señor, y él inclinó su oído y escuchó mi clamor; me sacó del hoyo de la desesperación, me rescató del cieno pantanoso, y plantó mis pies sobre una roca; ¡me hizo caminar con paso firme! Puso en mis labios un nuevo canto, un canto de alabanza a nuestro Dios. Muchos vieron esto y temieron, y pusieron su esperanza en el Señor. Dichoso el hombre que confía en el Señor y no en gente soberbia y mentirosa.
Salmos 40:1-4 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
1 (2) Puse mi esperanza en el Señor, y él se inclinó para escuchar mis gritos; 2 (3) me salvó de la fosa mortal, me libró de hundirme en el pantano. Afirmó mis pies sobre una roca; dio firmeza a mis pisadas. 3 (4) Hizo brotar de mis labios un nuevo canto, un canto de alabanza a nuestro Dios. Muchos, al ver esto, se sintieron conmovidos y pusieron su confianza en el Señor. 4 (5) ¡Feliz el hombre que confía en el Señor y no busca a los insolentes ni a los que adoran a dioses falsos!
Salmos 40:1-4 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Pacientemente esperé a Jehová, Y se inclinó a mí, y oyó mi clamor. Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso; Puso mis pies sobre peña, y enderezó mis pasos. Puso luego en mi boca cántico nuevo, alabanza a nuestro Dios. Verán esto muchos, y temerán, Y confiarán en Jehová. Bienaventurado el hombre que puso en Jehová su confianza, Y no mira a los soberbios, ni a los que se desvían tras la mentira.
Salmos 40:1-4 La Biblia de las Américas (LBLA)
Al SEÑOR esperé pacientemente, y Él se inclinó a mí y oyó mi clamor. Me sacó del hoyo de la destrucción, del lodo cenagoso; asentó mis pies sobre una roca y afirmó mis pasos. Puso en mi boca un cántico nuevo, un canto de alabanza a nuestro Dios; muchos verán esto, y temerán, y confiarán en el SEÑOR. ¶Cuán bienaventurado es el hombre que ha puesto en el SEÑOR su confianza, y no se ha vuelto a los soberbios ni a los que caen en falsedad.
Salmos 40:1-4 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Con paciencia esperé que el SEÑOR me ayudara, y él se fijó en mí y oyó mi clamor. Me sacó del foso de desesperación, del lodo y del fango. Puso mis pies sobre suelo firme y a medida que yo caminaba, me estabilizó. Me dio un canto nuevo para entonar, un himno de alabanza a nuestro Dios. Muchos verán lo que él hizo y quedarán asombrados; pondrán su confianza en el SEÑOR. Ah, qué alegría para los que confían en el SEÑOR, los que no confían en los orgullosos ni en aquellos que rinden culto a ídolos.