Salmos 140:6-13
Salmos 140:6-13 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Yo digo al SEÑOR: «Tú eres mi Dios. Atiende, SEÑOR, mi voz suplicante». SEÑOR Soberano, mi poderoso salvador, ¡tú proteges mi cabeza en el día de la batalla! No satisfagas, SEÑOR, los caprichos de los impíos; no permitas que sus planes prosperen, para que no se enorgullezcan. Selah Que sobre la cabeza de los que me rodean recaiga el mal que sus labios proclaman. Que lluevan brasas sobre ellos y sean echados en el fuego, en abismos profundos, de donde no vuelvan a salir. Que no eche raíces en la tierra la gente de lengua mentirosa; que la calamidad persiga y destruya a la gente que practica la violencia. Yo sé que el SEÑOR hace justicia al pobre y defiende el derecho de los necesitados. Ciertamente los justos alabarán tu nombre y los íntegros vivirán en tu presencia.
Salmos 140:6-13 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
6 (7) Pero yo te reconozco como mi único Dios; ¡por favor, escucha mis ruegos! 7 (8) Tú eres mi Dios; eres mi poderoso Salvador; tú me salvas la vida en el día de la batalla. 8 (9) Dios mío, no permitas que los malvados se salgan con la suya; no permitas que triunfen sus planes. 9 (10) ¡Haz caer sobre mis enemigos todo el mal que me desean! 10 (11) ¡Que caigan sobre ellos carbones encendidos! ¡Que caigan en pozos profundos y nunca más salgan de allí! 11 (12) ¡Que la gente mentirosa no vuelva a vivir en la tierra! ¡Que acabe la calamidad con toda la gente violenta! 12 (13) Dios mío, de una cosa estoy seguro: ¡tú defiendes y haces justicia a los pobres y necesitados! 13 (14) Por eso la gente honrada te alaba y vive contigo.
Salmos 140:6-13 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Yo, Señor, declaro que tú eres mi Dios; ¡dígnate, Señor, prestar oído a mi súplica! Tú, Señor mi Dios, eres mi poderoso salvador; ¡tú me proteges en el día de la batalla! ¡No permitas, Señor, que triunfen los malvados! ¡Frustra sus planes! ¡Que no se sientan superiores! En cuanto a los malvados que me rodean, ¡que su propia maldad los destruya! ¡Que caigan sobre ellos carbones encendidos! ¡Que sean arrojados al fuego! ¡Que caigan en un foso profundo y no vuelvan a salir! ¡Que esos mentirosos no afiancen su poder! ¡Que el mal alcance y derribe a los violentos! Yo sé que tú, Señor, defiendes a los pobres y les haces justicia a los afligidos. Por eso los hombres justos y rectos alaban tu nombre y vivirán en tu presencia.
Salmos 140:6-13 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
6 (7) Le he dicho al Señor: «Tú eres mi Dios; ¡escucha, pues, mi grito suplicante! 7 (8) Señor, Señor, mi Salvador poderoso, tú proteges mi cabeza en el combate.» 8-9 (9-10) Señor, no concedas al malvado sus deseos; no dejes que sus planes sigan adelante. Los que me rodean levantan la cabeza; ¡que caiga sobre ellos la maldición que lanzan! 10 (11) Que caigan sobre ellos carbones encendidos; que los echen en pozos, de donde no salgan más. 11 (12) Que no permanezca en la tierra el deslenguado; que el mal persiga al violento y lo destruya. 12 (13) Yo sé que el Señor hace justicia al pobre y defiende el derecho del afligido. 13 (14) Los hombres honrados alabarán tu nombre; ¡los hombres rectos vivirán en tu presencia!
Salmos 140:6-13 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
He dicho a Jehová: Dios mío eres tú; Escucha, oh Jehová, la voz de mis ruegos. Jehová Señor, potente salvador mío, Tú pusiste a cubierto mi cabeza en el día de batalla. No concedas, oh Jehová, al impío sus deseos; No saques adelante su pensamiento, para que no se ensoberbezca. Selah En cuanto a los que por todas partes me rodean, La maldad de sus propios labios cubrirá su cabeza. Caerán sobre ellos brasas; Serán echados en el fuego, En abismos profundos de donde no salgan. El hombre deslenguado no será firme en la tierra; El mal cazará al hombre injusto para derribarle. Yo sé que Jehová tomará a su cargo la causa del afligido, Y el derecho de los necesitados. Ciertamente los justos alabarán tu nombre; Los rectos morarán en tu presencia.
Salmos 140:6-13 La Biblia de las Américas (LBLA)
Dije al SEÑOR: Tú eres mi Dios; escucha, oh SEÑOR, la voz de mis súplicas. Oh DIOS, Señor, poder de mi salvación, tú cubriste mi cabeza en el día de la batalla. No concedas, SEÑOR, los deseos del impío; no hagas prosperar sus malos designios, para que no se exalten. (Selah) En cuanto a los que me rodean, que la malicia de sus labios los cubra. Caigan sobre ellos carbones encendidos; sean arrojados en el fuego, en abismos profundos de donde no se puedan levantar. Que el hombre de mala lengua no permanezca en la tierra; que al hombre violento lo persiga el mal implacablemente. Yo sé que el SEÑOR sostendrá la causa del afligido, y el derecho de los pobres. Ciertamente los justos darán gracias a tu nombre, y los rectos morarán en tu presencia.
Salmos 140:6-13 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Le dije al SEÑOR: «¡Tú eres mi Dios!». ¡Escucha, oh SEÑOR, mis súplicas por misericordia! Oh SEÑOR Soberano, tú eres el poderoso que me rescató. Tú me protegiste en el día de la batalla. SEÑOR, no permitas que los malvados se salgan con la suya; no dejes que prosperen sus maquinaciones malignas porque se volverán orgullosos. Interludio Que mis enemigos sean destruidos por el mismo mal que han planeado contra mí. Que les caigan carbones encendidos sobre la cabeza; que sean arrojados al fuego o a pozos llenos de agua donde no haya escapatoria. No dejes que los mentirosos prosperen en nuestra tierra; haz que les caigan grandes calamidades a los violentos. Pero a los que ellos persiguen, yo sé que el SEÑOR los ayudará y hará justicia a los pobres. Sin duda, los rectos alaban tu nombre; los justos vivirán en tu presencia.