Números 27:12-20
Números 27:12-20 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
El SEÑOR dijo a Moisés: —Sube al monte Abarín y contempla desde allí la tierra que he dado a los israelitas. Después de que la hayas contemplado, partirás de este mundo para reunirte con tus antepasados, como tu hermano Aarón. En el desierto de Zin, cuando la comunidad se puso a reclamar, ustedes dos se rebelaron contra mí, pues al sacar agua de la roca no reconocieron ante el pueblo mi santidad. Esas aguas de Meribá están en Cades, en el desierto de Zin. Moisés respondió al SEÑOR: —Dígnate, SEÑOR, Dios de todos los seres vivientes, a nombrar un jefe sobre esta comunidad, uno que vaya delante de ellos, y que los guíe en sus entradas y salidas. Así el pueblo del SEÑOR no se quedará como rebaño sin pastor. El SEÑOR dijo a Moisés: —Toma a Josué, hijo de Nun, en quien mora el Espíritu, pon tus manos sobre él y haz que se presente ante el sacerdote Eleazar y ante toda la comunidad. En presencia de ellos le entregarás el mando. Delega en él parte de tu autoridad para que toda la comunidad israelita le obedezca.
Números 27:12-21 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Dios le dijo a Moisés: —Ni tú ni tu hermano Aarón reconocieron mi grandeza. Ustedes dos me desobedecieron en el desierto de Sin, cuando el pueblo se peleó conmigo y me exigió agua en Meribá. Pero sube al monte Abarim para que veas el territorio que les voy a dar a los israelitas. Sin embargo, morirás sin disfrutar de él, como sucedió con tu hermano Aarón. Y Moisés le respondió: —Dios mío, tú eres el que nos da vida a todos. Te pido que les des a los israelitas un líder que los guíe por dondequiera que vayan. No dejes que tu pueblo ande como un rebaño de ovejas sin pastor. Entonces Dios le ordenó a Moisés
Números 27:12-20 Reina Valera Contemporánea (RVC)
El Señor le dijo a Moisés: «Sube a este monte Abarín. Desde allí verás la tierra que voy a darles a los hijos de Israel. Después de que la hayas visto, también tú irás a reunirte con tu pueblo, como tu hermano Aarón, porque allá en Meriba, en el desierto de Zin, cuando la congregación me hizo reclamos, ustedes se rebelaron contra mi mandato y delante de ellos no me santificaron.» Estas aguas de Meriba están en Cadés, en el desierto de Zin. Moisés le respondió al Señor: «Señor y Dios del espíritu que habita en todo ser, pon a cargo de la congregación alguien que salga al frente de ellos y que los haga volver. Que no sea tu congregación, Señor, como un rebaño de ovejas sin pastor.» Y el Señor le dijo: «Pues toma a Josué hijo de Nun, que es un hombre con espíritu. Pon tu mano sobre él, y llévalo ante el sacerdote Eleazar y ante toda la congregación, y en presencia de ellos entrégale el mando. Pon sobre él tus propias atribuciones, para que toda la congregación de los hijos de Israel le obedezca.
Números 27:12-20 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
El Señor le dijo a Moisés: —Sube a este monte de Abarim, y mira la tierra que les he dado a los israelitas. Después que la hayas visto, morirás y te reunirás con tus antepasados, como tu hermano Aarón, ya que ustedes dos desobedecieron mis órdenes en el desierto de Sin cuando el pueblo me hizo reclamaciones, y no me honraron delante de ellos cuando pidieron agua. (Esto se refiere al manantial de Meribá, en Cadés, en el desierto de Sin.) Y Moisés dijo al Señor: —Dios y Señor, tú que das la vida a todos los hombres, nombra un jefe que se ponga al frente de tu pueblo y lo guíe por todas partes, para que no ande como rebaño sin pastor. El Señor respondió a Moisés: —Josué, hijo de Nun, es un hombre de espíritu. Tómalo y pon tus manos sobre su cabeza. Luego preséntalo ante el sacerdote Eleazar y ante todo el pueblo, y dale el cargo delante de todos ellos; pon sobre él parte de tu autoridad, para que todo el pueblo de Israel le obedezca.
Números 27:12-20 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Jehová dijo a Moisés: Sube a este monte Abarim, y verás la tierra que he dado a los hijos de Israel. Y después que la hayas visto, tú también serás reunido a tu pueblo, como fue reunido tu hermano Aarón. Pues fuisteis rebeldes a mi mandato en el desierto de Zin, en la rencilla de la congregación, no santificándome en las aguas a ojos de ellos. Estas son las aguas de la rencilla de Cades en el desierto de Zin. Entonces respondió Moisés a Jehová, diciendo: Ponga Jehová, Dios de los espíritus de toda carne, un varón sobre la congregación, que salga delante de ellos y que entre delante de ellos, que los saque y los introduzca, para que la congregación de Jehová no sea como ovejas sin pastor. Y Jehová dijo a Moisés: Toma a Josué hijo de Nun, varón en el cual hay espíritu, y pondrás tu mano sobre él; y lo pondrás delante del sacerdote Eleazar, y delante de toda la congregación; y le darás el cargo en presencia de ellos. Y pondrás de tu dignidad sobre él, para que toda la congregación de los hijos de Israel le obedezca.
Números 27:12-20 La Biblia de las Américas (LBLA)
Entonces el SEÑOR dijo a Moisés: Sube a este monte Abarim, y mira la tierra que yo he dado a los hijos de Israel. Y cuando la hayas visto, tú también te reunirás a tu pueblo, como se reunió tu hermano Aarón. Porque cuando os rebelasteis contra mi mandamiento en el desierto de Zin durante la contienda de la congregación, debisteis santificarme en las aguas ante sus ojos. (Esas son las aguas de Meriba, de Cades, en el desierto de Zin.) Entonces Moisés habló al SEÑOR, diciendo: Ponga el SEÑOR, Dios de los espíritus de toda carne, un hombre sobre la congregación, que salga y entre delante de ellos, y que los haga salir y entrar a fin de que la congregación del SEÑOR no sea como ovejas que no tienen pastor. Y el SEÑOR dijo a Moisés: Toma a Josué, hijo de Nun, hombre en quien está el Espíritu, y pon tu mano sobre él; y haz que se ponga delante del sacerdote Eleazar, y delante de toda la congregación, e impártele autoridad a la vista de ellos. Y pondrás sobre él parte de tu dignidad a fin de que le obedezca toda la congregación de los hijos de Israel.
Números 27:12-20 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Cierto día el SEÑOR le dijo a Moisés: —Sube a una de las montañas al oriente del río, y contempla la tierra que le he dado al pueblo de Israel. Después de verla, al igual que tu hermano Aarón, morirás; pues los dos se rebelaron contra mis instrucciones en el desierto de Zin. Cuando los israelitas se rebelaron, ustedes no les demostraron mi santidad junto a las aguas. (Estas son las aguas de Meriba en Cades en el desierto de Zin). Entonces Moisés le dijo al SEÑOR: —Oh SEÑOR, tú eres el Dios que da aliento a todas las criaturas. Por favor, nombra a un nuevo hombre como líder de la comunidad. Dales a alguien que los guíe dondequiera que vayan y que los conduzca en batalla, para que la comunidad del SEÑOR no ande como ovejas sin pastor. El SEÑOR le respondió: —Toma a Josué, hijo de Nun, en quien está el Espíritu, y pon tus manos sobre él. Preséntalo al sacerdote Eleazar ante toda la comunidad y públicamente encárgale que dirija al pueblo. Entrégale de tu autoridad para que toda la comunidad de Israel lo obedezca.