Números 22:13-20
Números 22:13-20 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
La mañana siguiente Balán se levantó y dijo a los oficiales enviados por Balac: «Regresen a su tierra, porque el SEÑOR no quiere que yo vaya con ustedes». Los oficiales moabitas regresaron adonde estaba Balac y dijeron: «Balán no quiere venir con nosotros». Balac envió entonces a otros oficiales, más numerosos y distinguidos que los primeros, quienes fueron y dijeron a Balán: —Esto es lo que dice Balac, hijo de Zipor: No permitas que nada te impida venir a verme, porque yo te recompensaré con creces y haré todo lo que tú me pidas. Te ruego que vengas y maldigas por mí a este pueblo. Pero Balán respondió a los siervos de Balac: —Aun si Balac me diera su palacio lleno de oro y de plata, yo no podría hacer nada grande ni pequeño, sino ajustarme al mandamiento del SEÑOR mi Dios. Ustedes pueden también quedarse aquí esta noche, mientras yo averiguo si el SEÑOR quiere decirme alguna otra cosa. Aquella noche Dios se apareció a Balán y dijo: «Ya que estos hombres han venido a llamarte, ve con ellos, pero solo harás lo que yo te ordene».
Números 22:13-20 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Al día siguiente, Balaam se levantó y les dio a aquellos hombres el mensaje que Dios le había dado: «Regresen a su país, porque Dios no me deja ir con ustedes». Los jefes de Moab regresaron y le dijeron a Balac que Balaam no había querido venir con ellos. Entonces Balac envió a un grupo grande de los jefes más importantes de Moab. Cuando llegaron a donde estaba Balaam, le dieron el mensaje del rey: «Ven de inmediato; no te resistas. Si maldices a ese pueblo, te pagaré todo el dinero que quieras y te haré muy importante». Pero a pesar de eso, Balaam dijo: «Aunque Balac me ofrezca su palacio repleto de oro y de plata, no haré lo que me pide. ¡No puedo desobedecer al Dios de Israel! Quédense aquí esta noche, y veremos qué me pide hacer Dios». Esa noche Dios le dijo a Balaam: «Si esos hombres quieren que vayas con ellos, ve; pero solo harás lo que yo te diga».
Números 22:13-20 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Y así, al día siguiente Balaam se levantó y les dijo a los príncipes de Balac: «Vuelvan a su tierra. El Señor no me permite ir con ustedes.» Los príncipes de Moab se levantaron y fueron a decirle a Balac: «Balaam no quiso venir con nosotros.» Una vez más, Balac envió a otros príncipes, más importantes todavía que los anteriores, y estos le dijeron a Balaam: «Así dice Balac, hijo de Sipor: “Te ruego que no dejes de venir a mí. Puedes estar seguro de que yo te colmaré de riquezas, y haré todo lo que me digas. Por favor, ven y maldice por mí a este pueblo.”» Pero Balaam les respondió a los siervos de Balac: «Aun cuando Balac me dé su casa llena de oro y plata, yo no puedo desobedecer en lo más mínimo las órdenes del Señor. Yo les ruego que descansen aquí esta noche, hasta que yo sepa qué más me dice el Señor.» Durante la noche, Dios vino y le dijo a Balaam: «Puesto que estos hombres han acudido a ti, levántate y vete con ellos. Pero harás solo lo que yo te diga.»
Números 22:13-20 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Al día siguiente Balaam se levantó y les dijo a los jefes que había enviado Balac: —Regresen a su tierra. El Señor no me permite ir con ustedes. Los jefes de Moab regresaron a donde estaba Balac, y le dijeron: —Balaam no quiso venir con nosotros. Pero Balac insistió y volvió a enviar otros jefes, esta vez en mayor número y de más importancia que los primeros. Ellos fueron a ver a Balaam y le dijeron: —Balac, hijo de Sipor, te manda a decir: “Por favor, no te niegues a venir. Yo te daré los más grandes honores, y haré todo lo que me pidas; pero ven y hazme el favor de maldecir a este pueblo.” Pero Balaam les respondió: —Aunque Balac me diera todo el oro y la plata que caben en su palacio, yo no podría hacer nada, ni grande ni pequeño, que fuera contra las órdenes del Señor mi Dios. Sin embargo, quédense ustedes aquí también esta noche, y veré qué me dice esta vez el Señor. Por la noche, Dios se le apareció a Balaam y le dijo: —Si esos hombres han venido por ti, levántate y vete con ellos, pero tendrás que hacer solamente lo que yo te diga.
Números 22:13-20 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Así Balaam se levantó por la mañana y dijo a los príncipes de Balac: Volveos a vuestra tierra, porque Jehová no me quiere dejar ir con vosotros. Y los príncipes de Moab se levantaron, y vinieron a Balac y dijeron: Balaam no quiso venir con nosotros. Volvió Balac a enviar otra vez más príncipes, y más honorables que los otros; los cuales vinieron a Balaam, y le dijeron: Así dice Balac, hijo de Zipor: Te ruego que no dejes de venir a mí; porque sin duda te honraré mucho, y haré todo lo que me digas; ven, pues, ahora, maldíceme a este pueblo. Y Balaam respondió y dijo a los siervos de Balac: Aunque Balac me diese su casa llena de plata y oro, no puedo traspasar la palabra de Jehová mi Dios para hacer cosa chica ni grande. Os ruego, por tanto, ahora, que reposéis aquí esta noche, para que yo sepa qué me vuelve a decir Jehová. Y vino Dios a Balaam de noche, y le dijo: Si vinieron para llamarte estos hombres, levántate y vete con ellos; pero harás lo que yo te diga.
Números 22:13-20 La Biblia de las Américas (LBLA)
Balaam se levantó de mañana y dijo a los jefes de Balac: Volved a vuestra tierra, porque el SEÑOR ha rehusado dejarme ir con vosotros. Y los jefes de Moab se levantaron y volvieron a Balac, y le dijeron: Balaam rehusó venir con nosotros. Entonces Balac envió jefes otra vez, más numerosos y más distinguidos que los anteriores. Y fueron a Balaam, y le dijeron: Así dice Balac, hijo de Zipor: «Te ruego que no rehúses venir a mí; porque en verdad te honraré en gran manera, y haré cualquier cosa que me digas. Ven, pues, te ruego, y maldíceme a este pueblo». Y Balaam respondió, y dijo a los siervos de Balac: Aunque Balac me diera su casa llena de plata y oro, yo no podría traspasar el mandamiento del SEÑOR mi Dios para hacer ni poco ni mucho. Pero, os ruego que permanezcáis aquí también esta noche, y sabré qué más me dice el SEÑOR. Y Dios vino a Balaam de noche, y le dijo: Si los hombres han venido a llamarte, levántate y ve con ellos; pero solo dirás la palabra que yo te hable.
Números 22:13-20 Nueva Traducción Viviente (NTV)
A la mañana siguiente, Balaam se levantó y les dijo a los funcionarios de Balac: «¡Regresen a casa! El SEÑOR no me dejará ir con ustedes». Entonces los oficiales moabitas regresaron al rey Balac y le informaron: «Balaam se negó a venir con nosotros». Así que Balac intentó de nuevo. Esta vez envió a un mayor número de funcionarios, aún más distinguidos que los que envió la primera vez. Llegaron donde estaba Balaam y le transmitieron el siguiente mensaje: «Esto dice Balac, hijo de Zipor: “Por favor, no permitas que nada te impida venir a ayudarme. Te pagaré muy bien y haré todo lo que me pidas. ¡Solamente ven y maldíceme a este pueblo!”». Entonces Balaam les respondió a los mensajeros de Balac: «Aunque Balac me diera su palacio repleto de plata y oro, yo no podría hacer absolutamente nada en contra de la voluntad del SEÑOR mi Dios. Pero quédense aquí una noche más y veré si el SEÑOR tiene algo más que decirme». Esa noche Dios vino a Balaam y le dijo: «Ya que estos hombres vinieron por ti, levántate y ve con ellos, pero solo haz lo que yo te indique».