S. Marcos 10:22-24
S. Marcos 10:22-24 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Al oír esto, el hombre se puso muy triste y se fue desanimado, porque era muy rico. Jesús miró a su alrededor y dijo a sus discípulos: —¡Es muy difícil que una persona rica acepte a Dios como su rey! Los discípulos se sorprendieron al oír eso, pero Jesús volvió a decirles
S. Marcos 10:22-24 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Cuando aquel hombre oyó eso, se afligió y se fue triste, porque tenía muchas posesiones. Jesús miró a su alrededor, y les dijo a sus discípulos: «¡Qué difícil es para los ricos entrar en el reino de Dios!» Los discípulos se asombraron de sus palabras, pero Jesús volvió a decirles: «Hijos, ¡qué difícil es entrar en el reino de Dios!
S. Marcos 10:22-24 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Pero él, afligido por esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones. Entonces Jesús, mirando alrededor, dijo a sus discípulos: ¡Cuán difícilmente entrarán en el reino de Dios los que tienen riquezas! Los discípulos se asombraron de sus palabras; pero Jesús, respondiendo, volvió a decirles: Hijos, ¡cuán difícil les es entrar en el reino de Dios, a los que confían en las riquezas!
S. Marcos 10:22-24 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Al oír esto, el hombre puso cara larga y se fue triste porque tenía muchas posesiones. Jesús miró a su alrededor y dijo a sus discípulos: «¡Qué difícil es para los ricos entrar en el reino de Dios!». Los discípulos quedaron asombrados de sus palabras. Pero Jesús volvió a decir: «Queridos hijos, es muy difícil entrar en el reino de Dios.
S. Marcos 10:22-24 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Al oír esto, el hombre se desanimó y se fue triste porque tenía muchas riquezas. Jesús miró alrededor y comentó a sus discípulos: —¡Qué difícil es para los ricos entrar en el reino de Dios! Los discípulos se asombraron de sus palabras. —Hijos, ¡qué difícil es entrar en el reino de Dios! —repitió Jesús—.
S. Marcos 10:22-24 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
El hombre se afligió al oír esto; y se fue triste, porque era muy rico. Jesús miró entonces alrededor, y dijo a sus discípulos: —¡Qué difícil va a ser para los ricos entrar en el reino de Dios! Estas palabras dejaron asombrados a los discípulos, pero Jesús les volvió a decir: —Hijos, ¡qué difícil es entrar en el reino de Dios!
S. Marcos 10:22-24 La Biblia de las Américas (LBLA)
Pero él, afligido por estas palabras, se fue triste, porque era dueño de muchos bienes. Jesús, mirando en derredor, dijo* a sus discípulos: ¡Qué difícil será para los que tienen riquezas entrar en el reino de Dios! Y los discípulos se asombraron de sus palabras. Pero Jesús respondiendo de nuevo, les dijo*: Hijos, ¡qué difícil es entrar en el reino de Dios!