Levítico 26:40-46
Levítico 26:40-46 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
»Pero si confiesan su maldad y la de sus antepasados —su traición y constante oposición contra mí, que me obligaron a enviarlos al país de sus enemigos— y abandonan su terquedad, se humillan y reconocen su pecado, entonces me acordaré de mi pacto con Jacob, Isaac y Abraham; también me acordaré de la tierra. Al abandonar ellos la tierra, esta disfrutará de sus sábados mientras permanezca deshabitada. Pero tendrán que reconocer sus pecados, por cuanto rechazaron mis leyes y aborrecieron mis estatutos. A pesar de todo y, aunque estén en la tierra de sus enemigos, no los rechazaré ni los aborreceré hasta el punto de exterminarlos; tampoco romperé mi pacto con ellos. Yo soy el SEÑOR su Dios. Antes recordaré en su favor el pacto que hice con sus antepasados, a quienes, a la vista de las naciones, saqué de Egipto para ser su Dios. Yo soy el SEÑOR». Estos son los estatutos, ordenanzas y leyes que, por medio de Moisés, estableció el SEÑOR en el monte Sinaí entre él y los israelitas.
Levítico 26:38-46 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
»Sobre ustedes recaerá la culpa por los pecados que cometieron sus padres, y también la culpa por sus propios pecados. ¡Morirán en otras tierras, bajo el poder de sus enemigos! Entonces reconocerán que se rebelaron contra mí. Ahora son rebeldes y se comportan como las naciones que no creen en mí, pero entonces se humillarán y aceptarán el castigo de su maldad. »Yo cumpliré la promesa que les hice a Abraham, a Isaac y a Jacob, y bendeciré la tierra prometida; tierra que ustedes dejarán abandonada y que al fin gozará de su merecido descanso. ¡Pero ustedes serán castigados por su maldad y por no haber cumplido mis mandamientos! Y aunque estarán en un país enemigo, yo no los destruiré por completo. Mi enojo no llega a tanto. Yo soy el Dios de Israel, y renovaré el pacto que hice con sus antepasados, cuando los saqué de Egipto para ser su Dios. ¡Esto lo vieron todas las naciones!» Estas son las leyes que Dios nos dio por medio de Moisés, cuando estaba en el monte Sinaí.
Levítico 26:40-46 Reina Valera Contemporánea (RVC)
»Tal vez reconozcan su iniquidad, y la iniquidad de sus padres, y el hecho de haber pecado contra mí, y que además siempre se opusieron a mí, y que yo también me opuse a ellos y los llevé a la tierra de sus enemigos. Tal vez se humille su corazón incircunciso y reconozcan su pecado. En tal caso, yo me acordaré de mi pacto con Jacob, con Isaac y con Abrahán, y me acordaré también de la tierra. La tierra quedará entonces abandonada por ellos, y gozará de sus días de reposo al quedar desierta por culpa de ellos. Entonces ellos se someterán al castigo de sus iniquidades por haber menospreciado mis ordenanzas y por sentirse hastiados de mis estatutos. Pero a pesar de todo esto, y aunque ellos se encuentren en el país de sus enemigos, yo no los desecharé ni los aborreceré al grado de consumirlos; no invalidaré mi pacto con ellos, porque yo soy el Señor su Dios. Al contrario, me acordaré de ellos por causa del pacto antiguo, cuando a la vista de las naciones los saqué de Egipto para ser su Dios. Yo soy el Señor.» Estos son los estatutos, ordenanzas y leyes que, por medio de Moisés, estableció el Señor en el monte Sinaí entre él y los hijos de Israel.
Levítico 26:40-46 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
»Aunque ustedes reconozcan su maldad y la maldad de sus padres, lo mismo que su infidelidad y su oposición a mí, yo también me opondré a ustedes y los llevaré al país de sus enemigos; allí su mente pagana quedará humillada, y pagarán por su pecado. Entonces yo me acordaré de la alianza que hice con Jacob, con Isaac y con Abraham, y también me acordaré de la tierra, la cual quedará libre de ustedes y disfrutará de sus días de reposo mientras ustedes no la habiten; y pagarán ustedes por su maldad, porque despreciaron mis decretos y rechazaron mis leyes. »A pesar de esto, y aunque ustedes estén en un país enemigo, no los despreciaré ni los rechazaré; no los destruiré ni faltaré a la alianza que hice con sus antepasados, porque yo soy el Señor su Dios. Por el contrario, me acordaré de la alianza que hice con ellos cuando los saqué de Egipto en presencia de las naciones para ser su Dios. Yo soy el Señor.» Estas son las leyes, decretos y enseñanzas que por medio de Moisés estableció el Señor en el monte Sinaí, entre él y los israelitas.
Levítico 26:40-46 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Y confesarán su iniquidad, y la iniquidad de sus padres, por su prevaricación con que prevaricaron contra mí; y también porque anduvieron conmigo en oposición, yo también habré andado en contra de ellos, y los habré hecho entrar en la tierra de sus enemigos; y entonces se humillará su corazón incircunciso, y reconocerán su pecado. Entonces yo me acordaré de mi pacto con Jacob, y asimismo de mi pacto con Isaac, y también de mi pacto con Abraham me acordaré, y haré memoria de la tierra. Pero la tierra será abandonada por ellos, y gozará sus días de reposo, estando desierta a causa de ellos; y entonces se someterán al castigo de sus iniquidades; por cuanto menospreciaron mis ordenanzas, y su alma tuvo fastidio de mis estatutos. Y aun con todo esto, estando ellos en tierra de sus enemigos, yo no los desecharé, ni los abominaré para consumirlos, invalidando mi pacto con ellos; porque yo Jehová soy su Dios. Antes me acordaré de ellos por el pacto antiguo, cuando los saqué de la tierra de Egipto a los ojos de las naciones, para ser su Dios. Yo Jehová. Estos son los estatutos, ordenanzas y leyes que estableció Jehová entre sí y los hijos de Israel en el monte de Sinaí por mano de Moisés.
Levítico 26:40-46 La Biblia de las Américas (LBLA)
»Si confiesan su iniquidad y la iniquidad de sus antepasados, por las infidelidades que cometieron contra mí, y también porque procedieron con hostilidad contra mí (yo también procedía con hostilidad contra ellos para llevarlos a la tierra de sus enemigos), o si su corazón incircunciso se humilla, y reconocen sus iniquidades, entonces yo me acordaré de mi pacto con Jacob, me acordaré también de mi pacto con Isaac y de mi pacto con Abraham, y me acordaré de la tierra. Porque la tierra será abandonada por ellos, y gozará de sus días de reposo mientras quede desolada con su ausencia. Entretanto, ellos pagarán su iniquidad, porque despreciaron mis ordenanzas y su alma aborreció mis estatutos. Sin embargo, a pesar de esto, cuando estén en la tierra de sus enemigos no los desecharé ni los aborreceré tanto como para destruirlos, quebrantando mi pacto con ellos, porque yo soy el SEÑOR su Dios, sino que por ellos me acordaré del pacto con sus antepasados, que yo saqué de la tierra de Egipto a la vista de las naciones, para ser su Dios. Yo soy el SEÑOR». Estos son los estatutos, ordenanzas y leyes que el SEÑOR estableció entre Él y los hijos de Israel por medio de Moisés en el monte Sinaí.
Levítico 26:40-46 Nueva Traducción Viviente (NTV)
»Sin embargo, al fin mi pueblo confesará sus pecados y los pecados de sus antepasados por traicionarme y por ser hostiles hacia mí. Cuando yo haga que su hostilidad se vuelva contra ellos y los lleve a la tierra de sus enemigos, entonces, por fin, su obstinado corazón será humillado y pagarán por sus pecados. Entonces me acordaré de mi pacto con Jacob, de mi pacto con Isaac y de mi pacto con Abraham, y me acordaré de la tierra. Pues la tierra tendrá que ser abandonada para que goce de sus años de descanso mientras quede desolada. Al fin el pueblo pagará por sus pecados, pues continuamente ha rechazado mis ordenanzas y despreciado mis decretos. »A pesar de todo esto, cuando estén desterrados en la tierra de sus enemigos no los despreciaré ni los rechazaré por completo. No cancelaré mi pacto con ellos destruyéndolos, porque yo soy el SEÑOR su Dios. Por amor a ellos me acordaré de mi antiguo pacto con sus antepasados, a quienes saqué de la tierra de Egipto a los ojos de todas las naciones, para ser su Dios. Yo soy el SEÑOR». Estos son los decretos, las ordenanzas y las instrucciones que el SEÑOR dio por medio de Moisés en el monte Sinaí como evidencia de la relación entre él y los israelitas.