Levítico 26:1-13
Levítico 26:1-13 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
»No se hagan ídolos, ni levanten imágenes ni piedras sagradas. No coloquen en su territorio piedras esculpidas, ni se postren ante ellas. Yo soy el SEÑOR su Dios. »Observen mis sábados y muestren reverencia por mi santuario. Yo soy el SEÑOR. »Si se conducen según mis estatutos y obedecen fielmente mis mandamientos, yo enviaré lluvia a su tiempo, y la tierra y los árboles del campo darán sus frutos; la trilla durará hasta la vendimia, y la vendimia durará hasta la siembra. Comerán hasta saciarse y vivirán seguros en su tierra. »Yo traeré paz al país y ustedes podrán dormir sin ningún temor. Quitaré de la tierra las bestias salvajes y no habrá guerra en su territorio. Perseguirán a sus enemigos y ante ustedes caerán a filo de espada. Cinco de ustedes perseguirán a cien, y cien de ustedes perseguirán a diez mil, y ante ustedes sus enemigos caerán a filo de espada. »Yo les mostraré mi favor. Yo los haré fecundos. Los multiplicaré y mantendré mi pacto con ustedes. Todavía estarán comiendo de la cosecha del año anterior cuando tendrán que sacarla para dar lugar a la nueva. Estableceré mi morada en medio de ustedes y no los aborreceré. Caminaré entre ustedes. Yo seré su Dios y ustedes serán mi pueblo. Yo soy el SEÑOR su Dios que los saqué de Egipto para que dejaran de ser esclavos. Yo rompí las varas de su yugo y los hice caminar con la cabeza erguida.
Levítico 26:1-13 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
»No se fabriquen ninguna clase de ídolos, ni los adoren, pues yo soy Dios. »Muestren respeto por mi santuario, y descansen en día sábado. Yo soy el Dios de Israel. »Obedezcan fielmente mis leyes, y yo les enviaré lluvia a tiempo para que tengan buenas cosechas de cereales y de frutas. Será tan grande su cosecha, que no sabrán qué hacer con ella. Comerán hasta quedar satisfechos, y vivirán tranquilos. »Yo les daré paz y seguridad. No tendrán por qué tener miedo de los animales salvajes, ni tampoco de sus enemigos, pues ustedes fácilmente los derrotarán: bastarán cinco de ustedes para hacer huir a cien, y cien harán huir a diez mil. »Yo cumpliré las promesas que les hice. Los trataré con tanto amor que su nación será poderosa. Tan abundantes serán sus cosechas que tendrán que sacar de sus graneros el cereal viejo para guardar el nuevo. »Yo los acompañaré a dondequiera que vayan, y habitaré en el santuario que me han construido; nunca más los miraré con desagrado. Ustedes serán mi pueblo, y yo seré su Dios. Yo soy el Dios de Israel. Yo los saqué de Egipto y les di libertad. Deben sentirse orgullosos de esto, pues nunca más volverán a ser esclavos.
Levítico 26:1-13 Reina Valera Contemporánea (RVC)
»No se harán ídolos ni esculturas, ni levantarán estatuas, ni colocarán en su país piedras pintadas para adorarlas, porque yo soy el Señor su Dios. Respetarán mis días de reposo, y mostrarán reverencia por mi santuario. Yo soy el Señor. »Si ustedes siguen mis decretos, y cumplen y practican mis mandamientos, yo haré que llueva a tiempo, y que la tierra produzca, y que los árboles del campo den su fruto. Aún estarán cosechando su trigo cuando ya será tiempo de la vendimia, y aún estarán vendimiando cuando ya será tiempo de sembrar. Ustedes comerán su pan hasta saciarse, y habitarán la tierra en tranquilidad. Yo haré que haya paz en la tierra, y ustedes dormirán sin sobresaltos, porque yo eliminaré de su tierra los animales salvajes, y la espada no llegará a su país. Ustedes perseguirán a sus enemigos, y ellos caerán ante ustedes a filo de espada. Bastarán cinco de ustedes para poner en fuga a cien; un centenar de ustedes pondrá en fuga a diez mil, y sus enemigos caerán ante ustedes a filo de espada. Yo les mostraré mi favor y los haré crecer y multiplicarse, y afirmaré mi pacto con ustedes. Comerán alimentos añejados, y pondrán aparte lo añejo para guardar lo nuevo. Yo estableceré mi residencia en medio de ustedes, y no los rechazaré. Andaré entre ustedes, y yo seré su Dios, y ustedes serán mi pueblo. Yo soy el Señor su Dios, que los sacó de la tierra de Egipto, para que ya no fueran sus esclavos. Yo rompí las correas de su yugo, para que ustedes pudieran caminar con el rostro en alto.
Levítico 26:1-13 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
»No se hagan ídolos ni imágenes; no levanten en su país piedras sagradas ni piedras grabadas; no se inclinen ante ellas, porque yo soy el Señor su Dios. Respeten mis sábados; tengan reverencia por mi santuario: yo soy el Señor. »Si siguen mis leyes, y cumplen mis mandamientos y los practican, yo les enviaré la lluvia a su tiempo, y la tierra y los árboles del campo darán su fruto; tendrán trigo hasta la cosecha de las uvas, y uvas hasta el tiempo de la siembra; comerán pan hasta quedar satisfechos, y gozarán de tranquilidad en el país. Les daré bienestar en el país, y dormirán sin sobresaltos, pues yo libraré al país de animales feroces y de guerras. Ustedes harán huir a sus enemigos, y ellos caerán a filo de espada ante ustedes; cinco de ustedes harán huir a cien, y cien de ustedes harán huir a diez mil; sus enemigos caerán ante ustedes a filo de espada. Los miraré a ustedes con buenos ojos, y los haré crecer en número, y mantendré con ustedes mi alianza. Comerán del trigo almacenado en años anteriores, y hasta tendrán que desalojarlo para almacenar el trigo nuevo. »Yo viviré entre ustedes, y no los rechazaré; constantemente andaré entre ustedes, y seré su Dios, y ustedes serán mi pueblo. Yo soy el Señor su Dios, que los sacó de Egipto para que no siguieran siendo esclavos de ellos; yo rompí el yugo que pesaba sobre ustedes, y los hice andar con la frente en alto.
Levítico 26:1-13 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
No haréis para vosotros ídolos, ni escultura, ni os levantaréis estatua, ni pondréis en vuestra tierra piedra pintada para inclinaros a ella; porque yo soy Jehová vuestro Dios. Guardad mis días de reposo, y tened en reverencia mi santuario. Yo Jehová. Si anduviereis en mis decretos y guardareis mis mandamientos, y los pusiereis por obra, yo daré vuestra lluvia en su tiempo, y la tierra rendirá sus productos, y el árbol del campo dará su fruto. Vuestra trilla alcanzará a la vendimia, y la vendimia alcanzará a la sementera, y comeréis vuestro pan hasta saciaros, y habitaréis seguros en vuestra tierra. Y yo daré paz en la tierra, y dormiréis, y no habrá quien os espante; y haré quitar de vuestra tierra las malas bestias, y la espada no pasará por vuestro país. Y perseguiréis a vuestros enemigos, y caerán a espada delante de vosotros. Cinco de vosotros perseguirán a ciento, y ciento de vosotros perseguirán a diez mil, y vuestros enemigos caerán a filo de espada delante de vosotros. Porque yo me volveré a vosotros, y os haré crecer, y os multiplicaré, y afirmaré mi pacto con vosotros. Comeréis lo añejo de mucho tiempo, y pondréis fuera lo añejo para guardar lo nuevo. Y pondré mi morada en medio de vosotros, y mi alma no os abominará; y andaré entre vosotros, y yo seré vuestro Dios, y vosotros seréis mi pueblo. Yo Jehová vuestro Dios, que os saqué de la tierra de Egipto, para que no fueseis sus siervos, y rompí las coyundas de vuestro yugo, y os he hecho andar con el rostro erguido.
Levítico 26:1-13 La Biblia de las Américas (LBLA)
»No os haréis ídolos, ni os levantaréis imagen tallada ni pilares sagrados, ni pondréis en vuestra tierra piedra grabada para inclinaros ante ella; porque yo soy el SEÑOR vuestro Dios. Guardaréis mis días de reposo, y tendréis en reverencia mi santuario; yo soy el SEÑOR. Si andáis en mis estatutos y guardáis mis mandamientos para ponerlos por obra, yo os daré lluvias en su tiempo, de manera que la tierra dará sus productos, y los árboles del campo darán su fruto. Ciertamente, vuestra trilla os durará hasta la vendimia, y la vendimia hasta el tiempo de la siembra. Comeréis, pues, vuestro pan hasta que os saciéis y habitaréis seguros en vuestra tierra. Daré también paz en la tierra, para que durmáis sin que nadie os atemorice. Asimismo eliminaré bestias dañinas de vuestra tierra, y no pasará espada por vuestra tierra. Y vosotros perseguiréis a vuestros enemigos y caerán a espada delante de vosotros; cinco de vosotros perseguirán a cien, y cien de vosotros perseguirán a diez mil, y vuestros enemigos caerán a espada delante de vosotros. Me volveré hacia vosotros y os haré fecundos y os multiplicaré y confirmaré mi pacto con vosotros. Y comeréis de las provisiones almacenadas y tendréis que sacar lo almacenado para guardar lo nuevo. Además, haré mi morada en medio de vosotros, y mi alma no os aborrecerá. Andaré entre vosotros y seré vuestro Dios, y vosotros seréis mi pueblo. Yo soy el SEÑOR vuestro Dios, que os saqué de la tierra de Egipto para que no fuerais esclavos de ellos; rompí las varas de vuestro yugo y os hice andar erguidos.
Levítico 26:1-13 Nueva Traducción Viviente (NTV)
»No se hagan ídolos, ni levanten en su tierra imágenes talladas ni columnas sagradas ni piedras esculpidas para rendirles culto. Yo soy el SEÑOR su Dios. Deben guardar mis días de descanso y mostrar reverencia por mi santuario. Yo soy el SEÑOR. »Si siguen mis decretos y se aseguran de obedecer mis mandatos, les enviaré las lluvias de temporada. Entonces la tierra les dará sus cosechas y los árboles del campo producirán su fruto. La temporada de la trilla continuará aun después del comienzo de la cosecha de la uva, y la cosecha de la uva continuará aun después de la temporada de la siembra del grano. Comerán hasta saciarse y vivirán en seguridad dentro de su tierra. »Les daré paz en la tierra y podrán dormir sin temor alguno. Libraré la tierra de animales salvajes y mantendré a sus enemigos fuera del país. De hecho, perseguirán a sus enemigos y los masacrarán a filo de espada. ¡Cinco de ustedes perseguirán a cien, y cien de ustedes perseguirán a diez mil! Todos sus enemigos caerán bajo su espada. »Los miraré con agrado, los haré fértiles y multiplicaré su pueblo. Cumpliré mi pacto con ustedes. ¡Tendrán tal abundancia de cosechas que será necesario deshacerse del grano viejo para que haya lugar para la nueva cosecha! Viviré entre ustedes y no los despreciaré. Caminaré entre ustedes; seré su Dios, y ustedes serán mi pueblo. Yo soy el SEÑOR su Dios, quien los sacó de la tierra de Egipto para que ya no fueran esclavos. Yo quebré de su cuello el yugo de la esclavitud, a fin de que puedan caminar con la cabeza en alto.