Job 7:1-6
Job 7:1-6 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
»¿No tenemos todos una obligación en este mundo? ¿No son nuestros días como los de un jornalero? Como el esclavo que espera con ansias la noche, como el jornalero que ansioso espera su paga, meses enteros he vivido en vano; me han tocado noches de miseria. Me acuesto y pienso: “¿Cuánto falta para que amanezca?”. La noche se me hace interminable; me canso de dar vueltas en la cama hasta el amanecer. Tengo el cuerpo cubierto de gusanos y de costras; la piel se me rasga y me supura. »Mis días se van más veloces que una lanzadera, y sin esperanza alguna llegan a su fin.
Job 7:1-6 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
»He pasado noches miserables, he pasado meses enteros esperando en vano que terminen mis sufrimientos. Mi vida ha sido como la de un soldado que ansioso espera el fin de la guerra; como la de un peón, que ansioso espera su paga; como un esclavo fatigado, que ansioso espera que caiga la noche. Cuando me acuesto, la noche me parece interminable; doy vueltas en la cama sin poder pegar los ojos, y me pregunto cuándo amanecerá. Tengo todo el cuerpo lleno de gusanos y de costras; ¡por todos lados me sale pus! »La vida se me escapa con la velocidad del rayo. ¡Ya he perdido toda esperanza!
Job 7:1-6 Reina Valera Contemporánea (RVC)
»Nuestra vida en este mundo es de duro trabajo; nuestros días son como los de un jornalero. Somos como los esclavos: solo queremos descansar; parecemos asalariados: solo queremos que nos paguen. Pero en mi caso, ¿qué me ha tocado? ¡Meses de sufrimiento y noches de miseria! Me acuesto y me pregunto si volveré a levantarme; se me hacen largas las noches, esperando el nuevo día. Mi cuerpo es una costra infestada de gusanos; la poca piel que me queda huele mal y supura. Pasan mis días más veloces que una lanzadera, y ya he perdido toda esperanza.
Job 7:1-6 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
La vida del hombre aquí en la tierra es la de un soldado que cumple su servicio, la de un esclavo que suspira por la sombra, la de un peón que espera con ansias su salario. Me ha tocado vivir meses enteros de desengaño, noche tras noche de sufrimiento. Me acuesto y la noche se me hace interminable; me canso de dar vueltas hasta el alba, y pienso: ¿Cuándo me levantaré? Tengo el cuerpo lleno de gusanos y de costras, y me supuran las heridas de la piel. Mis días se acercan a su fin, sin esperanza, con la rapidez de una lanzadera de telar.
Job 7:1-6 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
¿No es acaso brega la vida del hombre sobre la tierra, Y sus días como los días del jornalero? Como el siervo suspira por la sombra, Y como el jornalero espera el reposo de su trabajo, Así he recibido meses de calamidad, Y noches de trabajo me dieron por cuenta. Cuando estoy acostado, digo: ¿Cuándo me levantaré? Mas la noche es larga, y estoy lleno de inquietudes hasta el alba. Mi carne está vestida de gusanos, y de costras de polvo; Mi piel hendida y abominable. Y mis días fueron más veloces que la lanzadera del tejedor, Y fenecieron sin esperanza.
Job 7:1-6 La Biblia de las Américas (LBLA)
¿No está el hombre obligado a trabajar sobre la tierra? ¿No son sus días como los días de un jornalero? Como esclavo que suspira por la sombra, y como jornalero que espera con ansias su paga, así me han dado en herencia meses inútiles, y noches de aflicción me han asignado. Cuando me acuesto, digo: «¿Cuándo me levantaré?». Pero la noche sigue, y estoy dando vueltas continuamente hasta el amanecer. Mi carne está cubierta de gusanos y de una costra de tierra; mi piel se endurece y supura. Mis días pasan más veloces que la lanzadera, y llegan a su fin sin esperanza.
Job 7:1-6 Nueva Traducción Viviente (NTV)
»¿No es toda la vida humana una lucha? Nuestra vida es como la de un jornalero, como la de un trabajador que anhela estar bajo la sombra, como la de un sirviente que espera cobrar su sueldo. A mí también me ha tocado vivir meses en vano, largas y pesadas noches de miseria. Tumbado en la cama, pienso: “¿Cuándo llegará la mañana?”; pero la noche se alarga y doy vueltas hasta el amanecer. Mi cuerpo está cubierto de gusanos y de costras; se me abre la piel y supura pus. »Mis días pasan más rápido que la lanzadera de un telar y terminan sin esperanza.