Job 2:5-7
Job 2:5-7 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Pero extiende la mano y hiérelo, ¡a ver si no te maldice en tu propia cara! —Muy bien —dijo el SEÑOR a Satanás—, Job está en tus manos. Eso sí, respeta su vida. Dicho esto, Satanás se retiró de la presencia del SEÑOR para afligir a Job con dolorosas úlceras desde la planta del pie hasta la coronilla.
Job 2:5-7 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Pero quítale a Job tu protección, tócalo en su propio cuerpo, ¡y ya verás cómo blasfema contra ti en tu propia cara!» Entonces el Señor dijo: «Ahí está Job. Lo dejo en tus manos. Pero no le quites la vida.» Satanás salió de la presencia del Señor, pero le envió a Job una sarna tan violenta que lo cubrió de pies a cabeza.
Job 2:5-7 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Te aseguro que si lo maltratas, ¡te maldecirá en tu propia cara! Dios le dijo: —Muy bien, te dejaré que lo maltrates, pero no le quites la vida. En cuanto el acusador se marchó, llenó a Job con llagas en todo el cuerpo.
Job 2:5-7 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Pero tócalo en su propia persona y verás cómo te maldice en tu propia cara. El Señor respondió al acusador: —Está bien, haz con él lo que quieras, con tal de que respetes su vida. El acusador se alejó de la presencia del Señor, y envió sobre Job una terrible enfermedad de la piel que lo cubrió de pies a cabeza.
Job 2:5-7 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Pero extiende ahora tu mano, y toca su hueso y su carne, y verás si no blasfema contra ti en tu misma presencia. Y Jehová dijo a Satanás: He aquí, él está en tu mano; mas guarda su vida. Entonces salió Satanás de la presencia de Jehová, e hirió a Job con una sarna maligna desde la planta del pie hasta la coronilla de la cabeza.
Job 2:5-7 La Biblia de las Américas (LBLA)
Sin embargo, extiende ahora tu mano y toca su hueso y su carne, verás si no te maldice en tu misma cara. Y el SEÑOR dijo a Satanás: He aquí, él está en tu mano; pero guarda su vida. Satanás salió de la presencia del SEÑOR, e hirió a Job con llagas malignas desde la planta del pie hasta la coronilla.
Job 2:5-7 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Así que extiende tu mano y quítale la salud, ¡ten por seguro que te maldecirá en tu propia cara! —Muy bien, haz con él lo que quieras —dijo el SEÑOR a Satanás—, pero no le quites la vida. Entonces Satanás salió de la presencia del SEÑOR e hirió a Job con terribles llagas en la piel, desde la cabeza hasta los pies.