S. Juan 11:11-17
S. Juan 11:11-17 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Dicho esto, añadió: —Nuestro amigo Lázaro duerme, pero voy a despertarlo. —Señor —respondieron sus discípulos—, si duerme, es que va a recuperarse. Jesús hablaba de la muerte de Lázaro, pero sus discípulos pensaron que se refería al sueño natural. Por eso les dijo claramente: —Lázaro ha muerto, y por causa de ustedes me alegro de no haber estado allí, para que crean. Pero vamos a verlo. Entonces Tomás, apodado el Gemelo, dijo a los otros discípulos: —Vayamos también nosotros para morir con él. A su llegada, Jesús se encontró con que Lázaro llevaba ya cuatro días en el sepulcro.
S. Juan 11:10-19 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Pero si camina de noche, tropieza porque le hace falta la luz. Nuestro amigo Lázaro está dormido, y yo voy a despertarlo. Los discípulos le dijeron: —Señor, si Lázaro está dormido, para qué te preocupas. Lo que Jesús quería darles a entender era que Lázaro había muerto, pero los discípulos entendieron que estaba descansando. Por eso Jesús les explicó: —Lázaro ha muerto, y me alegro de no haber estado allí, porque ahora ustedes tendrán oportunidad de confiar en mí. Vayamos a donde está él. Entonces Tomás, al que llamaban el Gemelo, les dijo a los otros discípulos: «Vayamos también nosotros, para morir con Jesús.» Como el pueblo de Betania estaba a unos tres kilómetros de la ciudad de Jerusalén, muchos de los judíos que vivían cerca de allí fueron a visitar a Marta y a María, para consolarlas por la muerte de su hermano. Cuando Jesús llegó a Betania, se enteró de que habían sepultado a Lázaro cuatro días antes.
S. Juan 11:11-17 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Dicho esto, agregó: «Nuestro amigo Lázaro duerme, pero voy para despertarlo.» Entonces, sus discípulos dijeron: «Señor, si duerme, sanará.» Pero Jesús decía esto de la muerte de Lázaro, aunque ellos pensaron que hablaba del reposo del sueño. Entonces Jesús les dijo abiertamente: «Lázaro ha muerto; y me alegro por ustedes de no haber estado allí, para que crean. Vayamos a verlo.» Tomás, a quien llamaban Dídimo, dijo a sus condiscípulos: «Vamos también nosotros, para que muramos con él.» Cuando Jesús llegó, se encontró con que hacía ya cuatro días que Lázaro estaba en el sepulcro.
S. Juan 11:11-17 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Después añadió: —Nuestro amigo Lázaro se ha dormido, pero voy a despertarlo. Los discípulos le dijeron: —Señor, si se ha dormido, es señal de que va a sanar. Pero lo que Jesús les decía es que Lázaro había muerto, mientras que los discípulos pensaban que se había referido al sueño natural. Entonces Jesús les dijo claramente: —Lázaro ha muerto. Y me alegro de no haber estado allí, porque así es mejor para ustedes, para que crean. Pero vamos a verlo. Entonces Tomás, al que llamaban el Gemelo, dijo a los otros discípulos: —Vamos también nosotros, para morir con él. Al llegar, Jesús se encontró con que ya hacía cuatro días que Lázaro había sido sepultado.
S. Juan 11:11-17 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Dicho esto, les dijo después: Nuestro amigo Lázaro duerme; mas voy para despertarle. Dijeron entonces sus discípulos: Señor, si duerme, sanará. Pero Jesús decía esto de la muerte de Lázaro; y ellos pensaron que hablaba del reposar del sueño. Entonces Jesús les dijo claramente: Lázaro ha muerto; y me alegro por vosotros, de no haber estado allí, para que creáis; mas vamos a él. Dijo entonces Tomás, llamado Dídimo, a sus condiscípulos: Vamos también nosotros, para que muramos con él. Vino, pues, Jesús, y halló que hacía ya cuatro días que Lázaro estaba en el sepulcro.
S. Juan 11:11-17 La Biblia de las Américas (LBLA)
Dijo esto, y después de esto añadió: Nuestro amigo Lázaro se ha dormido; pero voy a despertarlo. Los discípulos entonces le dijeron: Señor, si se ha dormido, se recuperará. Pero Jesús había hablado de la muerte de Lázaro, mas ellos creyeron que hablaba literalmente del sueño. Entonces Jesús, por eso, les dijo claramente: Lázaro ha muerto; y por causa de vosotros me alegro de no haber estado allí, para que creáis; pero vamos a donde está él. Tomás, llamado el Dídimo, dijo entonces a sus condiscípulos: Vamos nosotros también para morir con Él. Llegó, pues, Jesús y halló que ya hacía cuatro días que estaba en el sepulcro.
S. Juan 11:11-17 Nueva Traducción Viviente (NTV)
—Después agregó—: Nuestro amigo Lázaro se ha dormido, pero ahora iré a despertarlo. —Señor —dijeron los discípulos—, si se ha dormido, ¡pronto se pondrá mejor! Ellos pensaron que Jesús había querido decir que Lázaro solo estaba dormido, pero Jesús se refería a que Lázaro había muerto. Por eso les dijo claramente: —Lázaro está muerto. Y, por el bien de ustedes, me alegro de no haber estado allí, porque ahora ustedes van a creer de verdad. Vamos a verlo. Tomás, al que apodaban el Gemelo, les dijo a los otros discípulos: «Vamos nosotros también y moriremos con Jesús». Cuando Jesús llegó a Betania, le dijeron que Lázaro ya llevaba cuatro días en la tumba.