Isaías 40:13-18
Isaías 40:13-18 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
¿Quién puede medir el alcance del Espíritu del SEÑOR o quién puede servirle de consejero? ¿A quién consultó el SEÑOR para ilustrarse y quién le enseñó el camino de la justicia? ¿Quién le impartió conocimiento o le hizo conocer la senda de la inteligencia? A los ojos de Dios, las naciones son como una gota de agua en un balde, como una brizna de polvo en una balanza. Él pesa las islas como si fueran polvo fino. El Líbano no alcanza para el fuego de su altar ni todos sus animales para los holocaustos. Todas las naciones no son nada en su presencia; no tienen para él valor alguno. ¿Con quién compararán a Dios? ¿Con qué imagen lo representarán?
Isaías 40:13-20 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
»A Dios nadie le enseña nada; nadie le da consejos ni lecciones de ciencia y sabiduría. »Las naciones son, para él, como una gota de agua; ¡como un grano de polvo en la balanza! Los poderosos países que están en las islas del mar son para él lo mismo que un simple grano de arena. »No hay en los bosques del Líbano, animales ni leña suficientes para presentar en su altar una ofrenda como él se la merece. Para Dios, nada valen las naciones; ¡son lo mismo que nada! »A Dios no podemos compararlo con nada ni con nadie. No puede ser representado con ninguna imagen. Los escultores fabrican estatuas, los joyeros las recubren de oro y les ponen cadenitas de plata. Los que no tienen dinero buscan un palo que no se pudra y se lo llevan a un artesano; pero este, por más hábil que sea, hace un ídolo que ni pararse puede. ¡Pero a Dios no podemos compararlo con ninguna de estas imágenes!
Isaías 40:13-18 Reina Valera Contemporánea (RVC)
¿Quién instruyó al espíritu del Señor? ¿Quién le enseñó o le dio consejos? ¿De quién recibió consejos para tener entendimiento? ¿Quién le enseñó el camino de la justicia? ¿Quién le impartió conocimientos, o le mostró la senda de la prudencia? Para él, las naciones son como una gota de agua que cae del cubo; las considera como granos de polvo en las balanzas, y hace que las islas desaparezcan como polvo. Para presentarle una ofrenda, no bastan todos los árboles del Líbano para el fuego, ni todos sus animales para el sacrificio. En su presencia, todas las naciones no son nada; ¡él las considera inexistentes! ¿Con quién pueden comparar a Dios? ¿Qué imagen pueden hacerse de él?
Isaías 40:13-18 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
¿Quién ha corregido al Señor o quién le ha dado instrucciones? ¿Quién le dio consejos y entendimiento? ¿Quién le enseñó a juzgar con rectitud? ¿Quién lo instruyó en la ciencia? ¿Quién le dio lecciones de sabiduría? Para él las naciones son como una gota de agua, como un grano de polvo en la balanza; los países del mar valen lo que un grano de arena. En todo el Líbano no hay animales suficientes para ofrecerle un holocausto, ni leña suficiente para el fuego. Todas las naciones no son nada en su presencia; para él no tienen absolutamente ningún valor. ¿Con quién van ustedes a comparar a Dios? ¿Con qué imagen van a representarlo?
Isaías 40:13-18 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
¿Quién enseñó al Espíritu de Jehová, o le aconsejó enseñándole? ¿A quién pidió consejo para ser avisado? ¿Quién le enseñó el camino del juicio, o le enseñó ciencia, o le mostró la senda de la prudencia? He aquí que las naciones le son como la gota de agua que cae del cubo, y como menudo polvo en las balanzas le son estimadas; he aquí que hace desaparecer las islas como polvo. Ni el Líbano bastará para el fuego, ni todos sus animales para el sacrificio. Como nada son todas las naciones delante de él; y en su comparación serán estimadas en menos que nada, y que lo que no es. ¿A qué, pues, haréis semejante a Dios, o qué imagen le compondréis?
Isaías 40:13-18 La Biblia de las Américas (LBLA)
¿Quién guió al Espíritu del SEÑOR, o como consejero suyo le enseñó? ¿A quién pidió consejo y quién le dio entendimiento? ¿Quién le instruyó en la senda de la justicia, le enseñó conocimiento, y le mostró el camino de la inteligencia? He aquí, las naciones son como gota en un cubo, y son estimadas como grano de polvo en la balanza; he aquí, Él levanta las islas como al polvo fino. El Líbano no basta para el fuego, ni bastan sus bestias para el holocausto. Todas las naciones ante Él son como nada, menos que nada e insignificantes son consideradas por Él. ¶¿A quién, pues, asemejaréis a Dios, o con qué semejanza le compararéis?
Isaías 40:13-18 Nueva Traducción Viviente (NTV)
¿Quién puede dar consejos al Espíritu del SEÑOR? ¿Quién sabe lo suficiente para aconsejarlo o instruirlo? ¿Acaso el SEÑOR alguna vez ha necesitado el consejo de alguien? ¿Necesita que se le instruya sobre lo que es bueno? ¿Le enseñó alguien al SEÑOR lo que es correcto, o le mostró la senda de la justicia? No, porque todas las naciones del mundo no son más que un grano de arena en el desierto. No son más que una capa de polvo sobre la balanza. Él levanta el mundo entero como si fuera un grano de arena. Toda la madera de los bosques del Líbano y todos los animales del Líbano no serían suficientes para presentar una ofrenda quemada digna de nuestro Dios. Las naciones del mundo no valen nada para él. Ante sus ojos, cuentan menos que nada; son solo vacío y espuma. ¿Con quién podemos comparar a Dios? ¿Qué imagen se puede encontrar que se le parezca?