Hebreos 13:10-13
Hebreos 13:10-13 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Los sacerdotes del antiguo lugar de culto no tienen derecho a comer de lo que hay en nuestro altar. El Jefe de los sacerdotes lleva al antiguo lugar de culto la sangre de los animales sacrificados, para ofrecérsela a Dios y pedir el perdón por los pecados. Sin embargo, los cuerpos de esos animales se queman fuera del lugar donde vive el pueblo. Del mismo modo, Jesús murió fuera de la ciudad de Jerusalén para que, por medio de su sangre, Dios perdonara a su pueblo. Por eso, también nosotros debemos salir junto con Jesús, y compartir con él la vergüenza que le hicieron pasar al clavarlo en una cruz.
Hebreos 13:10-13 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Nosotros tenemos un altar, del cual no tienen derecho de comer los que sirven en el tabernáculo. Los cuerpos de los animales cuya sangre introduce el sumo sacerdote en el santuario a causa del pecado, se queman fuera del campamento. De igual manera, Jesús sufrió fuera de la puerta, para santificar así al pueblo mediante su propia sangre. Así que salgamos con él fuera del campamento, y llevemos su deshonra
Hebreos 13:10-13 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Nosotros tenemos un altar del cual no tienen derecho a comer los que ofician en el santuario. Porque el sumo sacerdote introduce la sangre de los animales en el Lugar Santísimo como sacrificio por el pecado, pero los cuerpos de esos animales se queman fuera del campamento. Por eso también Jesús, para santificar al pueblo mediante su propia sangre, sufrió fuera de la puerta de la ciudad. Por lo tanto, salgamos a su encuentro fuera del campamento, llevando la deshonra que él llevó
Hebreos 13:10-13 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Los sacerdotes del antiguo lugar de culto no tienen derecho a comer de lo que hay en nuestro altar. El Jefe de los sacerdotes lleva al antiguo lugar de culto la sangre de los animales sacrificados, para ofrecérsela a Dios y pedir el perdón por los pecados. Sin embargo, los cuerpos de esos animales se queman fuera del lugar donde vive el pueblo. Del mismo modo, Jesús murió fuera de la ciudad de Jerusalén para que, por medio de su sangre, Dios perdonara a su pueblo. Por eso, también nosotros debemos salir junto con Jesús, y compartir con él la vergüenza que le hicieron pasar al clavarlo en una cruz.
Hebreos 13:10-13 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Nosotros tenemos un altar, del cual no tienen derecho de comer los que sirven en el tabernáculo. Los cuerpos de los animales cuya sangre introduce el sumo sacerdote en el santuario a causa del pecado, se queman fuera del campamento. De igual manera, Jesús sufrió fuera de la puerta, para santificar así al pueblo mediante su propia sangre. Así que salgamos con él fuera del campamento, y llevemos su deshonra
Hebreos 13:10-13 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Nosotros tenemos un altar, del cual no tienen derecho a comer los sacerdotes del antiguo santuario. Pues el sumo sacerdote lleva la sangre de los animales al santuario, como ofrenda para quitar el pecado, pero los cuerpos de esos animales se queman fuera del campamento. Así también, Jesús sufrió la muerte fuera de la ciudad, para consagrar al pueblo por medio de su propia sangre. Vayamos, pues, con Jesús, fuera del campamento, y suframos la misma deshonra que él sufrió.
Hebreos 13:10-13 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Tenemos un altar, del cual no tienen derecho de comer los que sirven al tabernáculo. Porque los cuerpos de aquellos animales cuya sangre a causa del pecado es introducida en el santuario por el sumo sacerdote, son quemados fuera del campamento. Por lo cual también Jesús, para santificar al pueblo mediante su propia sangre, padeció fuera de la puerta. Salgamos, pues, a él, fuera del campamento, llevando su vituperio
Hebreos 13:10-13 La Biblia de las Américas (LBLA)
Nosotros tenemos un altar del cual no tienen derecho a comer los que sirven al tabernáculo. Porque los cuerpos de aquellos animales, cuya sangre es llevada al santuario por el sumo sacerdote como ofrenda por el pecado, son quemados fuera del campamento. Por lo cual también Jesús, para santificar al pueblo mediante su propia sangre, padeció fuera de la puerta. Así pues, salgamos a Él fuera del campamento, llevando su oprobio.
Hebreos 13:10-13 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Tenemos un altar del cual los sacerdotes del tabernáculo no tienen derecho a comer. Bajo el sistema antiguo, el sumo sacerdote llevaba la sangre de los animales al Lugar Santo como sacrificio por el pecado, y los cuerpos de esos animales se quemaban fuera del campamento. De igual manera, Jesús sufrió y murió fuera de las puertas de la ciudad para hacer santo a su pueblo mediante su propia sangre. Entonces salgamos al encuentro de Jesús, fuera del campamento, y llevemos la deshonra que él llevó.