Hebreos 12:12-16
Hebreos 12:12-16 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Por tanto, renueven las fuerzas de sus manos débiles y de sus rodillas temblorosas. «Hagan sendas derechas para sus pies» para que la pierna coja no se disloque, sino que se sane. Busquen la paz con todos y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. Asegúrense de que nadie quede fuera de la gracia de Dios, de que ninguna raíz amarga brote y cause dificultades y corrompa a muchos, y también de que nadie sea inmoral ni profano como Esaú, quien por un plato de comida vendió sus derechos de primogénito.
Hebreos 12:12-16 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Por todo eso, no debemos dejar de confiar totalmente en Dios. Si la vida es como una carrera, y ustedes tienen ya cansadas las manos y débiles las rodillas, cobren nuevas fuerzas. Corran por un camino recto y parejo, para que el pie que esté cojo se sane y no se tuerza más. Traten de vivir en paz con todos, y de obedecer a Dios; porque si no lo hacen, jamás lo verán cara a cara. No dejen que nadie se aleje del amor de Dios. Tampoco permitan que nadie cause problemas en el grupo, porque eso les haría daño; ¡sería como una planta amarga, que los envenenaría! Ninguno debe tener relaciones sexuales prohibidas ni despreciar a Dios. Eso fue lo que hizo Esaú, pues cambió sus derechos de hijo mayor por un plato de comida
Hebreos 12:12-16 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Levanten, pues, las manos caídas y las rodillas entumecidas; enderecen las sendas por donde van, para que no se desvíen los cojos, sino que sean sanados. Procuren vivir en paz con todos, y en santidad, sin la cual nadie verá al Señor. Tengan cuidado. No vayan a perderse la gracia de Dios; no dejen brotar ninguna raíz de amargura, pues podría estorbarles y hacer que muchos se contaminen con ella. Que no haya entre ustedes ningún libertino ni profano, como Esaú, que por una sola comida vendió su primogenitura.
Hebreos 12:12-16 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Así pues, renueven las fuerzas de sus manos cansadas y de sus rodillas debilitadas, y busquen el camino derecho, para que sane el pie que está cojo y no se tuerza más. Procuren estar en paz con todos y llevar una vida santa; pues sin la santidad, nadie podrá ver al Señor. Procuren que a nadie le falte la gracia de Dios, a fin de que ninguno sea como una planta de raíz amarga que hace daño y envenena a la gente. Que ninguno de ustedes se entregue a la prostitución ni desprecie lo sagrado; pues esto hizo Esaú, que por una sola comida vendió sus derechos de hijo mayor.
Hebreos 12:12-16 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Por lo cual, levantad las manos caídas y las rodillas paralizadas; y haced sendas derechas para vuestros pies, para que lo cojo no se salga del camino, sino que sea sanado. Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados; no sea que haya algún fornicario, o profano, como Esaú, que por una sola comida vendió su primogenitura.
Hebreos 12:12-16 La Biblia de las Américas (LBLA)
Por tanto, fortaleced las manos débiles y las rodillas que flaquean, y haced sendas derechas para vuestros pies, para que la pierna coja no se descoyunte, sino que se sane. Buscad la paz con todos y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor. Mirad bien de que nadie deje de alcanzar la gracia de Dios; de que ninguna raíz de amargura, brotando, cause dificultades y por ella muchos sean contaminados; de que no haya ninguna persona inmoral ni profana como Esaú, que vendió su primogenitura por una comida.
Hebreos 12:12-16 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Por lo tanto, renueven las fuerzas de sus manos cansadas y fortalezcan sus rodillas debilitadas. Tracen un camino recto para sus pies, a fin de que los débiles y los cojos no caigan, sino que se fortalezcan. Esfuércense por vivir en paz con todos y procuren llevar una vida santa, porque los que no son santos no verán al Señor. Cuídense unos a otros, para que ninguno de ustedes deje de recibir la gracia de Dios. Tengan cuidado de que no brote ninguna raíz venenosa de amargura, la cual los trastorne a ustedes y envenene a muchos. Asegúrense de que ninguno sea inmoral ni profano como Esaú, que cambió sus derechos de primer hijo varón por un simple plato de comida.