Éxodo 15:11-18
Éxodo 15:11-18 Nueva Traducción Viviente (NTV)
»Oh SEÑOR, entre los dioses, ¿quién es como tú: glorioso en santidad, imponente en esplendor, autor de grandes maravillas? Levantaste tu mano derecha, y la tierra se tragó a nuestros enemigos. »Con tu amor inagotable guías al pueblo que redimiste. Con tu poder los guías a tu hogar sagrado. Lo oyen los pueblos y tiemblan; la angustia se apodera de los que viven en Filistea. Los líderes de Edom están aterrados; los nobles de Moab tiemblan. Todos los que viven en Canaán se desvanecen; terror y espanto caen sobre ellos. El poder de tu brazo los deja sin vida, como una piedra, hasta que tu pueblo haya pasado, oh SEÑOR, hasta que haya pasado el pueblo que compraste. Tú lo traerás y lo plantarás en tu propio monte, el lugar, oh SEÑOR, reservado para tu morada, el santuario, oh Señor, que tus manos establecieron. ¡El SEÑOR reinará por siempre y para siempre!».
Éxodo 15:11-18 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
¿Quién, SEÑOR, se te compara entre los dioses? ¿Quién se te compara en grandeza y santidad? Tú, Hacedor de maravillas, nos impresionas con tus portentos. Extendiste tu brazo derecho, ¡y se los tragó la tierra! Por tu gran amor guías al pueblo que has rescatado; por tu fuerza los llevas a tu santa morada. Las naciones temblarán al escucharlo; la angustia dominará a los filisteos. Los jefes edomitas se llenarán de terror; temblarán de miedo los jefes de Moab. Los cananeos perderán el ánimo, pues caerá sobre ellos pavor y espanto. Por tu gran poder, SEÑOR, quedarán mudos como piedras hasta que haya pasado tu pueblo, el pueblo que adquiriste para ti. Tú los harás entrar y los plantarás en el monte que te pertenece; en el lugar donde tú, SEÑOR, habitas; en el santuario que tú, Señor, te hiciste. ¡El SEÑOR reina por siempre y para siempre!
Éxodo 15:11-18 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
»Dios mío, ¡no hay otro Dios como tú! ¡Solo tú eres grande! ¡Solo tú eres poderoso! Tú has hecho grandes maravillas; tú nos llenas de asombro. Decidiste usar tu gran poder y la tierra se tragó a los egipcios. »Tanto amas a tu pueblo que con tu fuerza lo has salvado y ahora lo vas guiando al lugar donde has decidido vivir. Cuando los filisteos lo sepan, se llenarán de angustia; los jefes edomitas y los cananeos empezarán a temblar de miedo. ¡Todos ellos se llenarán de angustia y de terror! »Dios mío, tu gran poder los dejará espantados, ¡inmóviles como piedras, hasta que tu pueblo haya pasado! Dios mío, tú nos llevarás a la montaña que elegiste para ti, y allí nos harás vivir para siempre. ¡Tú mismo la hiciste! ¡Tú mismo preparaste allí tu casa! »Dios mío, tú reinarás hoy, mañana y siempre».
Éxodo 15:11-18 Reina Valera Contemporánea (RVC)
¿Quién como tú, Señor, entre los dioses? ¿Quién como tú, santo y magnífico, que realizas maravillosas hazañas y llevas a cabo sorprendentes prodigios? Extendiste tu diestra, y la tierra se los tragó; en tu misericordia guías a tu pueblo redimido y con tu poder lo llevas a tu santa morada. Los pueblos lo saben, y tiemblan de miedo; en su tierra, los filisteos se doblan de dolor. Los caudillos de Edom quedan confundidos y los valientes de Moab tiemblan de pies a cabeza; ¡todos los cananeos se acobardan! Señor, ¡que les sobrevenga espanto y temor! ¡Queden mudos como piedras ante tu brazo poderoso, hasta que haya pasado tu pueblo, el pueblo que tú mismo rescataste! Tú, Señor, los llevarás al monte donde habitas, al lugar que has preparado, y allí los plantarás, en el santuario que tú mismo has afirmado. ¡Tú, Señor, reinas ahora y siempre!
Éxodo 15:11-18 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Oh, Señor, ¡ningún dios puede compararse a ti! ¡Nadie es santo ni grande como tú! ¡Haces cosas maravillosas y terribles! ¡Eres digno de alabanza! ¡Desplegaste tu poder y se los tragó la tierra! Con tu amor vas dirigiendo a este pueblo que salvaste; con tu poder lo llevas a tu santa casa. Las naciones temblarán cuando lo sepan, los filisteos se retorcerán de dolor, los capitanes de Edom se quedarán sin aliento, los jefes de Moab temblarán de miedo, y perderán el valor todos los cananeos. Oh, Señor, ¡que se asusten!, ¡que tengan miedo!, ¡que se queden como piedras por la fuerza de tu brazo, hasta que haya pasado tu pueblo, el pueblo que has hecho tuyo! Oh, Señor, llévanos a vivir a tu santo monte, al lugar que escogiste para vivir, al santuario que afirmaste con tus manos. ¡El Señor reina por toda la eternidad!»
Éxodo 15:11-18 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
¿Quién como tú, oh Jehová, entre los dioses? ¿Quién como tú, magnífico en santidad, Terrible en maravillosas hazañas, hacedor de prodigios? Extendiste tu diestra; La tierra los tragó. Condujiste en tu misericordia a este pueblo que redimiste; Lo llevaste con tu poder a tu santa morada. Lo oirán los pueblos, y temblarán; Se apoderará dolor de la tierra de los filisteos. Entonces los caudillos de Edom se turbarán; A los valientes de Moab les sobrecogerá temblor; Se acobardarán todos los moradores de Canaán. Caiga sobre ellos temblor y espanto; A la grandeza de tu brazo enmudezcan como una piedra; Hasta que haya pasado tu pueblo, oh Jehová, Hasta que haya pasado este pueblo que tú rescataste. Tú los introducirás y los plantarás en el monte de tu heredad, En el lugar de tu morada, que tú has preparado, oh Jehová, En el santuario que tus manos, oh Jehová, han afirmado. Jehová reinará eternamente y para siempre.
Éxodo 15:11-18 La Biblia de las Américas (LBLA)
¿Quién como tú entre los dioses, oh SEÑOR? ¿Quién como tú, majestuoso en santidad, temible en las alabanzas, haciendo maravillas? Extendiste tu diestra, los tragó la tierra. En tu misericordia has guiado al pueblo que has redimido; con tu poder los has guiado a tu santa morada. Lo han oído los pueblos y tiemblan; el pavor se ha apoderado de los habitantes de Filistea. Entonces se turbaron los príncipes de Edom; los valientes de Moab se sobrecogieron de temblor; se acobardaron todos los habitantes de Canaán. Terror y espanto cae sobre ellos; por la grandeza de tu brazo quedan inmóviles, como piedra, hasta que tu pueblo pasa, oh SEÑOR, hasta que pasa el pueblo que tú has comprado. Tú los traerás y los plantarás en el monte de tu heredad, el lugar que has hecho para tu morada, oh SEÑOR, el santuario, oh Señor, que tus manos han establecido. El SEÑOR reinará para siempre jamás.