Deuteronomio 29:1-4
Deuteronomio 29:1-4 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Estos son los términos del pacto que, por orden del SEÑOR, hizo Moisés en Moab con los israelitas, además del pacto que ya había hecho con ellos en Horeb. Moisés convocó a todos los israelitas y dijo: Ustedes vieron todo lo que el SEÑOR hizo en Egipto con el faraón, sus funcionarios y con todo su país. Con sus propios ojos vieron aquellas grandes pruebas, señales y maravillas. Pero hasta este día el SEÑOR no les ha dado mente para entender, ni ojos para ver, ni oídos para oír.
Deuteronomio 29:1-4 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
1-3 (28.69—29.2) Moisés terminó de dar a los israelitas todas las instrucciones del pacto que Dios había hecho con ellos en el monte Horeb. Entonces Dios le ordenó que hiciera un nuevo pacto con ellos en el país de Moab. Moisés los reunió y les dio las instrucciones del nuevo pacto. Les dijo: «Ustedes han sido testigos de las muchas maravillas que Dios hizo para castigar a los egipcios. Ustedes vieron cómo trató al rey de Egipto, a sus oficiales y a todo el pueblo. 4 (3) Hasta ahora Dios no ha permitido que ustedes entiendan por qué hizo todo eso.
Deuteronomio 29:1-4 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Estas son las palabras del pacto que el Señor ordenó a Moisés celebrar en Moab con los hijos de Israel, además del pacto que concertó con ellos en Horeb. Moisés llamó a todos los israelitas, y les dijo: «Ustedes han visto con sus propios ojos todo lo que el Señor ha hecho en la tierra de Egipto con el faraón y con todos sus siervos, y con todo su país. Ustedes son testigos de esas grandes pruebas y señales y maravillas. Pero hasta este día el Señor no les ha dado la capacidad de entender, ni de ver ni de oír.
Deuteronomio 29:1-4 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
1 (28.69) Estos son los términos de la alianza que el Señor ordenó a Moisés hacer con los israelitas en el país de Moab, además de la alianza que ya había hecho con ellos en el monte Horeb. 2 (1) Moisés reunió a todos los israelitas y les dijo: «Ustedes han visto todo lo que el Señor hizo en Egipto al faraón, a sus funcionarios y a todo su país, 3 (2) y son testigos de esas grandes pruebas, señales y maravillas. 4 (3) Pero hasta ahora el Señor no les ha dado entendimiento ni les ha permitido comprender el significado de todo ello.
Deuteronomio 29:1-4 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Estas son las palabras del pacto que Jehová mandó a Moisés que celebrase con los hijos de Israel en la tierra de Moab, además del pacto que concertó con ellos en Horeb. Moisés, pues, llamó a todo Israel, y les dijo: Vosotros habéis visto todo lo que Jehová ha hecho delante de vuestros ojos en la tierra de Egipto a Faraón y a todos sus siervos, y a toda su tierra, las grandes pruebas que vieron vuestros ojos, las señales y las grandes maravillas. Pero hasta hoy Jehová no os ha dado corazón para entender, ni ojos para ver, ni oídos para oír.
Deuteronomio 29:1-4 La Biblia de las Américas (LBLA)
Estas son las palabras del pacto que el SEÑOR mandó a Moisés que hiciera con los hijos de Israel en la tierra de Moab, además del pacto que Él había hecho con ellos en Horeb. Y convocó Moisés a todo Israel y les dijo: Habéis visto todo lo que el SEÑOR hizo delante de vuestros ojos en la tierra de Egipto a Faraón, a todos sus siervos y a toda su tierra, las grandes pruebas que vieron vuestros ojos, aquellas grandes señales y maravillas. Pero hasta el día de hoy el SEÑOR no os ha dado corazón para entender, ni ojos para ver, ni oídos para oír.
Deuteronomio 29:1-4 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Estas son las condiciones del pacto que el SEÑOR le encomendó a Moisés que hiciera con los israelitas cuando estaban en la tierra de Moab, además del pacto que había hecho con ellos en el monte Sinaí. Entonces Moisés convocó a todo el pueblo de Israel y le dijo: «Tú has visto con tus propios ojos todo lo que el SEÑOR hizo en la tierra de Egipto, tanto al faraón como a todos sus sirvientes y al resto del país; presenciaste las grandes demostraciones de su fuerza, las señales asombrosas y los milagros sorprendentes. ¡Pero hasta el día de hoy, el SEÑOR no te ha dado mente para comprender ni ojos para ver ni oídos para oír!