Hechos 4:25-26
Hechos 4:25-26 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
tú, por medio del Espíritu Santo, dijiste en labios de nuestro padre David, tu siervo: »“¿Por qué se enfurecen las naciones y en vano conspiran los pueblos? Los reyes de la tierra se rebelan; los gobernantes se confabulan contra el Señor y contra su ungido”.
Hechos 4:25-26 Nueva Traducción Viviente (NTV)
hace mucho tiempo tú hablaste por el Espíritu Santo mediante nuestro antepasado David, tu siervo, y dijiste: “¿Por qué estaban tan enojadas las naciones? ¿Por qué perdieron el tiempo en planes inútiles? Los reyes de la tierra se prepararon para la batalla, los gobernantes se reunieron en contra del SEÑOR y en contra de su Mesías”.
Hechos 4:25-26 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Tú, por medio del Espíritu Santo, le hablaste al rey David, nuestro antepasado. Por medio de David, que estaba a tu servicio, dijiste: “¿Por qué se rebelan contra Dios las naciones y los pueblos? ¿Por qué estudian la manera de luchar contra Dios y contra el Mesías que él escogió? ¡Inútiles son los planes de los reyes de este mundo!”
Hechos 4:25-26 Reina Valera Contemporánea (RVC)
tú, Padre nuestro, por medio del Espíritu Santo dijiste en labios de tu siervo David: »¿Por qué se amotinan las gentes, y los pueblos piensan cosas vanas? Los reyes de la tierra se reunieron, y los príncipes se confabularon, contra el Señor, y contra su Cristo.
Hechos 4:25-26 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
dijiste por medio del Espíritu Santo y por boca de nuestro patriarca David, tu siervo: “¿Por qué se alborotan los pueblos? ¿Por qué hacen planes sin sentido? Los reyes y gobernantes de la tierra se rebelan, y juntos conspiran contra el Señor y contra su escogido, el Mesías.”
Hechos 4:25-26 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
que por boca de David tu siervo dijiste: ¿Por qué se amotinan las gentes, Y los pueblos piensan cosas vanas? Se reunieron los reyes de la tierra, Y los príncipes se juntaron en uno Contra el Señor, y contra su Cristo.
Hechos 4:25-26 La Biblia de las Américas (LBLA)
el que por el Espíritu Santo, por boca de nuestro padre David, tu siervo, dijiste: ¿POR QUé SE ENFURECIERON LOS GENTILES, Y LOS PUEBLOS TRAMARON COSAS VANAS? SE PRESENTARON LOS REYES DE LA TIERRA, Y LOS GOBERNANTES SE JUNTARON A UNA CONTRA EL SEÑOR Y CONTRA SU CRISTO.