2 Reyes 19:33-37
2 Reyes 19:33-37 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Volverá por el mismo camino que vino; ¡en esta ciudad no entrará!”. Yo, el SEÑOR, lo afirmo. Por mi honor y por consideración a David mi siervo, defenderé esta ciudad y la salvaré». Esa misma noche el ángel del SEÑOR salió y mató a ciento ochenta y cinco mil hombres del campamento asirio. A la mañana siguiente, cuando los demás se levantaron, allí estaban tendidos todos los cadáveres. Así que Senaquerib, rey de Asiria, levantó el campamento y se retiró. Volvió a Nínive y permaneció allí. Pero un día, mientras adoraba en el templo de su dios Nisroc, sus hijos Adramélec y Sarézer lo mataron a espada y escaparon a la tierra de Ararat. Y su hijo Esarjadón lo sucedió en el trono.
2 Reyes 19:32-37 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
»Dios quiere que sepas que Senaquerib no entrará a Jerusalén. No disparará ni una sola flecha; no la atacará ni construirá plataformas para subir por sus murallas. Tendrá que volver por donde vino. Dios ha dado su palabra. Dios protegerá esta ciudad, por amor a sí mismo, y por amor a David, quien le fue fiel en todo». Esa noche, el ángel de Dios fue y mató a ciento ochenta y cinco mil soldados del ejército asirio, y a la mañana siguiente el campo estaba lleno de muertos. Entonces Senaquerib regresó a su país y se quedó en la ciudad de Nínive. Pero un día, mientras Senaquerib estaba adorando en el templo de su dios Nisroc, sus hijos Adramélec y Sarézer fueron y lo mataron, y luego escaparon a la región de Ararat. En su lugar reinó su hijo Esarhadón.
2 Reyes 19:33-37 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Por el mismo camino que vino, volverá, y no entrará en esta ciudad. —Palabra del Señor. »”Por mí mismo, y por mi siervo David, yo ampararé a esta ciudad, y la salvaré.”» Y sucedió que esa misma noche el ángel del Señor salió y mató a ciento ochenta y cinco mil hombres en el campamento de los asirios. Por la mañana, cuando se levantaron, se encontraron con que por todas partes había cadáveres. Entonces el rey Senaquerib de Asiria se fue de regreso a Nínive, y nunca más volvió, pues un día, mientras él adoraba en el templo de Nisroc, su dios, sus hijos Adramelec y Sarezer lo hirieron a filo de espada, y luego huyeron al territorio de Ararat. En su lugar reinó su hijo Esarjadón.
2 Reyes 19:33-37 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Por el mismo camino por donde vino, se volverá; no entrará en esta ciudad. Yo, el Señor, doy mi palabra. Yo protegeré esta ciudad y la salvaré, por consideración a mi siervo David y a mí mismo.”» Aquella misma noche el ángel del Señor fue y mató a ciento ochenta y cinco mil hombres del campamento asirio, y al día siguiente todos amanecieron muertos. Entonces Senaquerib, rey de Asiria, levantó el campamento y regresó a Nínive. Y un día, cuando estaba adorando en el templo de Nisroc, su dios, sus hijos Adramélec y Sarézer fueron y lo asesinaron, y huyeron a la región de Ararat. Después reinó en su lugar su hijo Esarhadón.
2 Reyes 19:33-37 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Por el mismo camino que vino, volverá, y no entrará en esta ciudad, dice Jehová. Porque yo ampararé esta ciudad para salvarla, por amor a mí mismo, y por amor a David mi siervo. Y aconteció que aquella misma noche salió el ángel de Jehová, y mató en el campamento de los asirios a ciento ochenta y cinco mil; y cuando se levantaron por la mañana, he aquí que todo era cuerpos de muertos. Entonces Senaquerib rey de Asiria se fue, y volvió a Nínive, donde se quedó. Y aconteció que mientras él adoraba en el templo de Nisroc su dios, Adramelec y Sarezer sus hijos lo hirieron a espada, y huyeron a tierra de Ararat. Y reinó en su lugar Esar-hadón su hijo.
2 Reyes 19:33-37 La Biblia de las Américas (LBLA)
Por el camino que vino, por él se volverá, y no entrará en esta ciudad” —declara el SEÑOR. Porque defenderé esta ciudad para salvarla por amor a mí mismo y por amor a mi siervo David». Y aconteció que aquella misma noche salió el ángel del SEÑOR e hirió a ciento ochenta y cinco mil en el campamento de los asirios; cuando los demás se levantaron por la mañana, he aquí, todos eran cadáveres. Senaquerib, rey de Asiria, partió y regresó a su tierra, y habitó en Nínive. Y sucedió que mientras él adoraba en la casa de su dios Nisroc, Adramelec y Sarezer lo mataron a espada y huyeron a la tierra de Ararat. Y su hijo Esar-hadón reinó en su lugar.
2 Reyes 19:33-37 Nueva Traducción Viviente (NTV)
El rey regresará a su propia tierra por el mismo camino por donde vino. No entrará en esta ciudad, dice el SEÑOR. Por mi propia honra y por amor a mi siervo David, defenderé esta ciudad y la protegeré”». Esa noche el ángel del SEÑOR fue al campamento asirio y mató a 185.000 soldados. Cuando los asirios que sobrevivieron se despertaron a la mañana siguiente, encontraron cadáveres por todas partes. Entonces Senaquerib, rey de Asiria, levantó campamento y regresó a su propia tierra. Volvió a Nínive, la capital del reino, y allí se quedó. Cierto día, mientras rendía culto en el templo de su dios Nisroc, sus hijos Adramelec y Sarezer lo mataron a espada. Luego escaparon a la tierra de Ararat, y otro de sus hijos, Esar-hadón, lo sucedió en el trono de Asiria.