1 Samuel 21:9-15
1 Samuel 21:9-15 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
El sacerdote respondió: —Aquí tengo la espada del filisteo Goliat, a quien mataste en el valle de Elá. Está detrás del efod, envuelta en un paño. Puedes llevártela, si quieres. Otras armas no tengo. —Dámela —dijo David—. ¡Es la mejor que podrías ofrecerme! Ese mismo día David, todavía huyendo de Saúl, se dirigió a Aquis, rey de Gat. Los oficiales dijeron a Aquis: —¿No es este David, el rey del país? ¿No es él por quien danzaban, y en los cantos decían: «Saúl mató a sus miles, pero David, a sus diez miles»? Al oír esto, David se preocupó y tuvo mucho miedo de Aquis, rey de Gat. Por lo tanto, fingió perder la razón y, en público, comenzó a portarse como un loco, haciendo garabatos en las puertas y dejando que la saliva le corriera por la barba. Aquis dijo entonces a sus oficiales: —Pero ¿qué, no se fijan? ¡Ese hombre está loco! ¿Para qué me lo traen? ¿Acaso me hacen falta más locos que encima me traen a este para hacer sus locuras en mi presencia? ¡Sáquenlo de mi palacio!
1 Samuel 21:7-15 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
7-9 (8-10) David le dijo a Ahimélec: —¿Podrías prestarme alguna lanza o espada? Fue tan urgente la orden del rey, que no alcancé a traer ningún arma conmigo. —No tengo más que la espada de Goliat —contestó el sacerdote—. Es la espada del filisteo que mataste en el valle de Elá. Está allí, envuelta en tela, detrás de mi chaleco sacerdotal. Puedes llevártela, si quieres. —Está muy bien —aceptó David—. Dámela. Ese día estaba en el santuario un edomita llamado Doeg, que era el jefe de los pastores de Saúl. 10 (11) David siguió huyendo de Saúl, y de allí se fue a Gat, que era una ciudad filistea. Cuando llegó allá, 11 (12) lo llevaron ante el rey Aquís, a quien sus consejeros le dijeron: «Este es David, el rey de esta tierra, de quien habla la canción: “Saúl mató a mil soldados, pero David mató a diez mil”». 12 (13) Cuando David supo esto, tuvo mucho miedo de que el rey Aquís fuera a hacerle daño. 13 (14) Entonces empezó a rasguñar los portones de la ciudad y a babear, como si estuviera loco. 14 (15) Aquís les reclamó a sus consejeros: «¿Para qué me trajeron a este loco? 15 (16) ¡Ya tengo en mi palacio suficientes locos, como para que me traigan otro más!»
1 Samuel 21:9-15 Reina Valera Contemporánea (RVC)
El sacerdote le respondió: «Tengo la espada del filisteo Goliat, al que tú venciste en el valle de Elá. Está aquí, detrás del efod, envuelta en un velo. Si te sirve, tómala. Es la única que tengo.» Y David le dijo: «Ninguna otra sería mejor. Dámela.» Ese día David huyó de los dominios de Saúl y llegó al pueblo de Gat, donde Aquis era rey. Los siervos de Aquis le dijeron: «¡Aquí está David, el rey de esta tierra! Este es de quien, entre danzas y cantos, la gente decía: “Saúl mató a miles de guerreros, pero David mató a más de diez mil.”» Cuando David oyó esto, presintió que había peligro y tuvo miedo de Aquis, el rey de Gat. Entonces cambió su comportamiento y fingió estar loco, y se puso a escribir en las puertas, y dejaba que la saliva le corriera por la barba. Al verlo, Aquis dijo a sus siervos: «¿No se dan cuenta que este hombre está loco? ¿Para qué me lo traen? ¿Acaso faltan locos en mi casa, para que me traigan a este a hacer sus locuras delante de mí? ¿Creen que voy a dejar que entre aquí?»
1 Samuel 21:9-15 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
9 (10) El sacerdote le respondió: —Sí. Tengo la espada de Goliat, el filisteo que tú venciste en el valle de Elá. Está ahí, detrás del efod, envuelta en una capa. Puedes llevártela, si quieres; más armas no tengo. David contestó: —Ninguna otra sería mejor. Dámela. 10 (11) Aquel mismo día David siguió huyendo de Saúl, y fue a presentarse a Aquís, el rey de Gat. 11 (12) Y los oficiales de Aquís le dijeron: —¡Pero si este es David, servidor de Saúl, el rey de esta tierra! ¡Él es de quien cantaban en las danzas: “Mil hombres mató Saúl, y diez mil mató David”! 12 (13) David tomó muy en cuenta estos comentarios, y tuvo miedo de Aquís, rey de Gat. 13 (14) Por eso, delante de ellos cambió su conducta normal, y fingiéndose loco escribía garabatos en las puertas y dejaba que la saliva le corriera por la barba. 14 (15) Entonces Aquís dijo a sus oficiales: —Si ustedes ven que este hombre está loco, ¿para qué me lo trajeron? 15 (16) ¿Acaso me hacen falta locos, que me han traído a este para que haga sus locuras en mi propia casa?
1 Samuel 21:9-15 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Y el sacerdote respondió: La espada de Goliat el filisteo, al que tú venciste en el valle de Ela, está aquí envuelta en un velo detrás del efod; si quieres tomarla, tómala; porque aquí no hay otra sino esa. Y dijo David: Ninguna como ella; dámela. Y levantándose David aquel día, huyó de la presencia de Saúl, y se fue a Aquis rey de Gat. Y los siervos de Aquis le dijeron: ¿No es este David, el rey de la tierra? ¿no es este de quien cantaban en las danzas, diciendo: Hirió Saúl a sus miles, Y David a sus diez miles? Y David puso en su corazón estas palabras, y tuvo gran temor de Aquis rey de Gat. Y cambió su manera de comportarse delante de ellos, y se fingió loco entre ellos, y escribía en las portadas de las puertas, y dejaba correr la saliva por su barba. Y dijo Aquis a sus siervos: He aquí, veis que este hombre es demente; ¿por qué lo habéis traído a mí? ¿Acaso me faltan locos, para que hayáis traído a este que hiciese de loco delante de mí? ¿Había de entrar este en mi casa?
1 Samuel 21:9-15 La Biblia de las Américas (LBLA)
Entonces el sacerdote dijo: He aquí, la espada de Goliat el filisteo, a quien mataste en el valle de Ela, está envuelta en un paño detrás del efod; si quieres llevártela, tómala, porque aquí no hay otra sino esa. Y David dijo: Como esa no hay otra; dámela. David se levantó y huyó aquel día de Saúl, y fue a donde estaba Aquis, rey de Gat. Pero los siervos de Aquis le dijeron: ¿No es este David, el rey de la tierra? ¿No cantaban de él en las danzas, diciendo: «Saúl mató a sus miles, y David a sus diez miles»? David tomó en serio estas palabras y temió grandemente a Aquis, rey de Gat. Y se fingió demente ante sus ojos y actuaba como loco en medio de ellos; escribía garabatos en las puertas de la entrada y dejaba que su saliva le corriera por la barba. Entonces Aquis dijo a sus siervos: He aquí, veis al hombre portándose como un loco. ¿Por qué me lo traéis? ¿Acaso me hacen falta locos, que me habéis traído a este para que haga de loco en mi presencia? ¿Va a entrar este en mi casa?
1 Samuel 21:9-15 Nueva Traducción Viviente (NTV)
—Solo tengo la espada de Goliat el filisteo, a quien tú mataste en el valle de Ela —le contestó el sacerdote—. Está envuelta en una tela detrás del efod. Tómala si quieres, porque es la única que tengo. —¡Esta espada es sin igual —respondió David—, dámela! Entonces David escapó de Saúl y fue donde el rey Aquis de Gat. Pero a los oficiales de Aquis no les agradaba que David estuviera allí. «¿No es este David, el rey de la tierra? —preguntaron—. ¿No es este a quien el pueblo honra con danzas, y canta: “Saúl mató a sus miles, y David, a sus diez miles”?». David oyó esos comentarios y tuvo mucho miedo de lo que el rey Aquis de Gat pudiera hacer con él. Así que se hizo pasar por loco, arañando las puertas y dejando que la saliva escurriera por su barba. Finalmente, el rey Aquis le dijo a sus hombres: —¿Tienen que traerme a un loco? ¡Ya tenemos suficientes de ellos aquí! ¿Por qué habría de permitir que alguien como él sea huésped en mi casa?