1 Samuel 13:8-13
1 Samuel 13:8-13 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Allí estuvo esperando siete días, según el plazo indicado por Samuel, pero este no llegaba. Como los soldados comenzaban a desbandarse, Saúl ordenó: «Tráiganme el holocausto y los sacrificios de comunión»; y él mismo ofreció el holocausto. En el momento en que Saúl terminaba de celebrar el sacrificio, llegó Samuel. Saúl salió a recibirlo y lo saludó. Pero Samuel reclamó: —¿Qué has hecho? Y Saúl respondió: —Pues, como vi que la gente se desbandaba, que tú no llegabas en el plazo indicado, y que los filisteos se habían juntado en Micmás, pensé: “Los filisteos ya están por atacarme en Guilgal, y ni siquiera he implorado el favor del SEÑOR”. Por eso me atreví a ofrecer el holocausto. —¡Te has portado como un necio! —respondió Samuel—. No has cumplido el mandamiento que te dio el SEÑOR tu Dios. El SEÑOR habría establecido tu reino sobre Israel para siempre
1 Samuel 13:8-13 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
Allí en Guilgal Saúl esperó a Samuel siete días, para que presentara las ofrendas y los sacrificios, pues antes de eso no podían empezar la batalla. Pero al ver Saúl que Samuel no llegaba y que los de su ejército comenzaban a huir, ordenó: «Tráiganme los animales y las ofrendas de paz que vamos a presentarle a Dios». Y Saúl mismo presentó las ofrendas. Todavía no terminaba de ofrecerlas cuando Samuel llegó. Al verlo, Saúl fue a saludarlo; pero Samuel le dijo: —¿Qué es lo que has hecho? Y Saúl le respondió: —Es que mis soldados ya me estaban abandonando, y tú no llegabas, como prometiste hacerlo. Por eso tuve que presentar las ofrendas para pedir la ayuda de Dios. Además, los filisteos ya estaban en Micmás, listos para venir a Guilgal y atacarme. Pero Samuel le dijo
1 Samuel 13:8-13 Reina Valera Contemporánea (RVC)
Saúl esperó allí siete días, de acuerdo con el plazo que Samuel le había fijado, pero como no llegaba, el pueblo empezó a desertar. Entonces Saúl ordenó: «Que traigan un holocausto y ofrendas de paz», y ofreció el holocausto. Saúl estaba terminando de ofrecer el holocausto cuando llegó Samuel; Saúl salió a darle la bienvenida, pero Samuel le dijo: «¿Qué es lo que has hecho?» Y Saúl respondió: «Me di cuenta de que el pueblo estaba desertando y, como tú no venías y los filisteos estaban reunidos en Micmas, pensé: “Ahora los filisteos van a venir a Gilgal para luchar contra mí, y yo no he implorado la ayuda del Señor.” Así que me armé de valor y ofrecí el holocausto.» Pero Samuel le dijo a Saúl: «Lo que has hecho es una locura. No obedeciste lo que el Señor tu Dios te ordenó hacer. Si hubieras obedecido, el Señor habría confirmado para siempre tu reinado sobre Israel.
1 Samuel 13:8-13 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Allí esperó Saúl siete días, según el plazo que le había indicado Samuel; pero Samuel no llegaba a Guilgal, y la gente comenzaba a irse. Entonces Saúl ordenó: —Tráiganme animales para los holocaustos y los sacrificios de reconciliación. Y él mismo ofreció el holocausto. En el momento en que Saúl terminaba de ofrecer el holocausto, llegó Samuel. Entonces Saúl salió para recibirlo y saludarlo, pero Samuel le dijo: —¿Por qué has hecho eso? Saúl respondió: —Cuando vi que la gente comenzaba a irse, y que tú no llegabas en la fecha indicada, y que los filisteos estaban reunidos en Micmás, pensé que ellos bajarían a atacarme en Guilgal, sin que yo me hubiera encomendado al Señor; por eso me vi en la necesidad de ofrecer yo mismo el holocausto. Samuel le contestó: —¡Lo que has hecho es una locura! Si hubieras obedecido la orden que el Señor te dio, él habría confirmado para siempre tu reinado en Israel.
1 Samuel 13:8-13 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
Y él esperó siete días, conforme al plazo que Samuel había dicho; pero Samuel no venía a Gilgal, y el pueblo se le desertaba. Entonces dijo Saúl: Traedme holocausto y ofrendas de paz. Y ofreció el holocausto. Y cuando él acababa de ofrecer el holocausto, he aquí Samuel que venía; y Saúl salió a recibirle, para saludarle. Entonces Samuel dijo: ¿Qué has hecho? Y Saúl respondió: Porque vi que el pueblo se me desertaba, y que tú no venías dentro del plazo señalado, y que los filisteos estaban reunidos en Micmas, me dije: Ahora descenderán los filisteos contra mí a Gilgal, y yo no he implorado el favor de Jehová. Me esforcé, pues, y ofrecí holocausto. Entonces Samuel dijo a Saúl: Locamente has hecho; no guardaste el mandamiento de Jehová tu Dios que él te había ordenado; pues ahora Jehová hubiera confirmado tu reino sobre Israel para siempre.
1 Samuel 13:8-13 La Biblia de las Américas (LBLA)
El esperó siete días, conforme al tiempo que Samuel había señalado, pero Samuel no llegaba a Gilgal, y el pueblo se le dispersaba. Entonces Saúl dijo: Traedme el holocausto y las ofrendas de paz. Y él ofreció el holocausto. Y sucedió que tan pronto como terminó de ofrecer el holocausto, he aquí que Samuel vino; y Saúl salió a su encuentro para saludarle. Pero Samuel dijo: ¿Qué has hecho? Y Saúl respondió: Como vi que el pueblo se me dispersaba, que tú no llegabas dentro de los días señalados y que los filisteos estaban reunidos en Micmas, me dije: «Ahora los filisteos descenderán contra mí en Gilgal, y no he implorado el favor del SEÑOR». Así que me vi forzado, y ofrecí el holocausto. Y Samuel dijo a Saúl: Has obrado neciamente; no has guardado el mandamiento que el SEÑOR tu Dios te ordenó, pues ahora el SEÑOR hubiera establecido tu reino sobre Israel para siempre.
1 Samuel 13:8-13 Nueva Traducción Viviente (NTV)
Durante siete días Saúl esperó allí, según las instrucciones de Samuel, pero aun así Samuel no llegaba. Saúl se dio cuenta de que sus tropas habían comenzado a desertar, de modo que ordenó: «¡Tráiganme la ofrenda quemada y las ofrendas de paz!». Y Saúl mismo sacrificó la ofrenda quemada. Precisamente cuando Saúl terminaba de sacrificar la ofrenda quemada, llegó Samuel. Saúl salió a recibirlo, pero Samuel preguntó: —¿Qué has hecho? Saúl le contestó: —Vi que mis hombres me abandonaban, y que tú no llegabas cuando prometiste, y que los filisteos ya están en Micmas, listos para la batalla. Así que dije: “¡Los filisteos están listos para marchar contra nosotros en Gilgal, y yo ni siquiera he pedido ayuda al SEÑOR!”. De manera que me vi obligado a ofrecer yo mismo la ofrenda quemada antes de que tú llegaras. —¡Qué tontería! —exclamó Samuel—. No obedeciste al mandato que te dio el SEÑOR tu Dios. Si lo hubieras obedecido, el SEÑOR habría establecido tu reinado sobre Israel para siempre.