1 Pedro 4:5-6
1 Pedro 4:5-6 Nueva Versión Internacional - Español (NVI)
Pero ellos tendrán que rendirle cuentas a aquel que está preparado para juzgar a los vivos y a los muertos. Por esto se predicó el mensaje de las buenas noticias también a los muertos para que, a pesar de haber sido juzgados según criterios humanos en lo que atañe al cuerpo, vivan conforme a Dios en lo que atañe al espíritu.
1 Pedro 4:5-6 Traducción en Lenguaje Actual (TLA)
¡Pero ya tendrán que darle cuentas a Dios, el Juez que está preparado para juzgar a los vivos y a los muertos! Para eso anunció Cristo la buena noticia, aun a los muertos: para que después de que Dios los juzgue por lo que hicieron en vida, sus espíritus puedan vivir con Dios.
1 Pedro 4:5-6 Reina Valera Contemporánea (RVC)
pero tendrán que dar cuenta de ello al que está preparado para juzgar a los vivos y a los muertos. Por esto también a los muertos se les predicó el evangelio, para que sean juzgados en su cuerpo según los criterios humanos, pero vivan en el espíritu según Dios.
1 Pedro 4:5-6 Biblia Dios Habla Hoy (DHH94I)
Pero ellos tendrán que rendir cuentas ante aquel que está preparado para juzgar a los vivos y a los muertos. Pues aun a personas muertas se les anunció la buena noticia, para que pudieran vivir en el espíritu, según Dios, aunque en este mundo hubieran sido juzgados en el cuerpo, según los hombres.
1 Pedro 4:5-6 Biblia Reina Valera 1960 (RVR1960)
pero ellos darán cuenta al que está preparado para juzgar a los vivos y a los muertos. Porque por esto también ha sido predicado el evangelio a los muertos, para que sean juzgados en carne según los hombres, pero vivan en espíritu según Dios.
1 Pedro 4:5-6 La Biblia de las Américas (LBLA)
pero ellos darán cuenta a aquel que está preparado para juzgar a los vivos y a los muertos. Porque con este fin fue predicado el evangelio aun a los muertos, para que aunque sean juzgados en la carne como hombres, vivan en el espíritu conforme a la voluntad de Dios.
1 Pedro 4:5-6 Nueva Traducción Viviente (NTV)
pero recuerden que ellos tendrán que enfrentarse con Dios, quien está listo para juzgar a todos, tanto a vivos como a muertos. Por esta razón, la Buena Noticia fue predicada a los que ahora están muertos; aunque fueron destinados a morir como toda la gente, ahora vivirán para siempre con Dios en el Espíritu.