Logo de YouVersion
Icono de búsqueda

Salmos 32:4-5

Salmos 32:4-5 DHH94I

pues de día y de noche tu mano pesaba sobre mí. Como flor marchita por el calor del verano, así me sentía decaer. Pero te confesé sin reservas mi pecado y mi maldad; decidí confesarte mis pecados, y tú, Señor, los perdonaste.

Lee Salmos 32