Cachorro de león, Judá;
De la presa subiste, hijo mío.
Se encorvó, se echó como león,
Así como león viejo: ¿quién lo despertará?
No será quitado el cetro de Judá,
Ni el legislador de entre sus pies,
Hasta que venga Siloh;
Y a él se congregarán los pueblos.
Atando a la vid su pollino,
Y a la cepa el hijo de su asna,
Lavó en el vino su vestido,
Y en la sangre de uvas su manto.
Sus ojos, rojos del vino,
Y sus dientes blancos de la leche.
Zabulón en puertos de mar habitará;
Será para puerto de naves,
Y su límite hasta Sidón.
Isacar, asno fuerte
Que se recuesta entre los apriscos;
Y vio que el descanso era bueno, y que la tierra era deleitosa;
Y bajó su hombro para llevar,
Y sirvió en tributo.
Dan juzgará a su pueblo,
Como una de las tribus de Israel.
Será Dan serpiente junto al camino,
Víbora junto a la senda,
Que muerde los talones del caballo,
Y hace caer hacia atrás al jinete.
Tu salvación esperé, oh Jehová.
Gad, ejército lo acometerá;
Mas él acometerá al fin.
El pan de Aser será substancioso,
Y él dará deleites al rey.
Neftalí, cierva suelta,
Que pronunciará dichos hermosos.
Rama fructífera es José,
Rama fructífera junto a una fuente,
Cuyos vástagos se extienden sobre el muro.
Le causaron amargura,
Le asaetearon,
Y le aborrecieron los arqueros;
Mas su arco se mantuvo poderoso,
Y los brazos de sus manos se fortalecieron
Por las manos del Fuerte de Jacob
(Por el nombre del Pastor, la Roca de Israel)