Ciertamente, tú eres mi roca y mi castillo; guíame; encamíname por causa de tu nombre. Sácame de la red que me han tendido, pues tú eres mi refugio. En tus manos encomiendo mi espíritu; ¡ponme a salvo, Señor, Dios de la verdad! Señor, yo confío en ti, pero odio a los que adoran ídolos huecos.
Leer Salmos 31
Compartir
Comparar todas las versiones: Salmos 31:3-6
¡Guarda versículos, lee sin conexión, mira videos didácticos y más!
Inicio
Biblia
Planes
Videos