Versículos más leídos de la Biblia GÁLATAS 5

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En cambio, el Espíritu da frutos de amor, alegría y paz; de paciencia, amabilidad y bondad; de fidelidad, humildad y dominio propio. No hay ley que condene cosas como estas.

Por lo tanto, digo: Vivid según el Espíritu y no busquéis satisfacer vuestros malos deseos.

Si ahora vivimos por el Espíritu, dejemos también que el Espíritu nos guíe.

Y los que son de Cristo Jesús han crucificado ya la naturaleza del hombre pecador junto con sus pasiones y malos deseos.

Es fácil descubrir cómo se portan quienes siguen los malos deseos: cometen inmoralidades sexuales, hacen cosas impuras y viciosas, adoran ídolos y practican la brujería. Mantienen odios, discordias y celos. Se irritan fácilmente, provocan rivalidades, divisiones y partidismos. Son envidiosos, borrachos, glotones y otras cosas por el estilo. Os advierto, como ya antes lo hice, que quienes así se conducen no tendrán parte en el reino de Dios.

Hermanos, habéis sido llamados a ser libres. Pero no uséis esta libertad para dar rienda suelta a vuestros instintos. Más bien servíos por amor los unos a los otros.

Porque los malos deseos están en contra del Espíritu, y el Espíritu está en contra de los malos deseos. El uno está en contra de los otros y por eso no podéis hacer lo que quisierais.

Porque toda la ley se resume en este solo mandamiento: “Ama a tu prójimo como a ti mismo”.

No seamos orgullosos ni sembremos rivalidades y envidias entre nosotros.

Cristo nos liberó para que seamos libres. Por lo tanto manteneos firmes en esa libertad y no os sometáis otra vez al yugo de la esclavitud.