Planes y devocionales gratis relacionados con Job 38:8

La vida tiene el poder de pesar tanto en nuestra mente que nos olvidamos de admirar la belleza de Dios. Con esta devoción, volverás al lugar del asombro y la maravilla. Si Dios puede estirar el universo con Sus manos, ningún problema es insuperable para Él.

Este Plan analizará cómo la Biblia nos dice que Dios está preparando todas las cosas para aquellos que le aman y cómo el dolor y la pérdida no tienen la última palabra; Dios la tiene.

En este plan examinaremos cómo la Biblia nos dice que Dios está resolviendo todas las cosas para quienes lo aman, y cómo el duelo y la pérdida no tienen la última palabra, sino Dios.

Para aquellos que estamos vivos en el planeta tierra en la actualidad, estos tiempos resultan ser sin precedentes. Históricamente, podemos encontrar esperanza si acudimos al Único que creó todo y es Señor de todo. ¿Qué dice la biblia sobre las cosas que ocurren? ¿Cuál es la respuesta de Dios sobre ello y cuál es mi esperanza en vida y muerte?

En este plan de lectura de seis días, reflexiona sobre la historia de Job y descubre cómo se puede confiar en Dios en medio del sufrimiento.

¿Estás experimentando el dolor y la pena de la pérdida del embarazo? Caminemos juntos a través de las muchas emociones, hagamos preguntas difíciles y busquemos respuestas bíblicas. La inconcebible redención de Dios no solo es posible en los momentos más oscuros, sino que es más evidente y sorprendente en ellos.

Algunas de las grandes preguntas de la humanidad son: ¿Por qué hacemos lo que hacemos? ¿De qué sirve tanto esfuerzo? ¿Vale la pena seguir creyendo? Incluso, nos cansamos de hacer el bien. La Biblia tiene tres libros de sabiduría, donde cada uno de ellos plantea una idea diferente intentando responder estas preguntas, te invito que me acompañes a explorar esta serie.

Este plan devocional se centra en la vida de Job. Job es un libro poético y el tema principal del libro es ¿por qué sufren los justos? Muchos pequeños y grandes "Job" luchan con esta pregunta. Pero el mismo libro nos arroja una respuesta clara. La causa de las pruebas de Job no se encontraba en la tierra, sino en el cielo.