Viaje al pesebreMuestra

Vivir plenamente para Él

El nacimiento de Jesús fue la promesa de esperanza y redención para un pueblo desesperado por un nuevo Rey. Su vida sirvió como un ejemplo de cómo debemos seguir a Dios en todas las circunstancias. Su muerte pagó el precio por nuestros pecados, permitiéndonos ser restaurados en nuestra relación con Dios. Su resurrección cumplió las profecías de antaño y derrotó el poder del pecado y la muerte. Pero el ministerio de Jesús por siempre trasciende las generaciones y sigue cambiando el mundo cada día.

Dios envió a su Hijo al mundo por primera vez como un niño humilde, poniendo en marcha Su poderoso plan de redención. Jesús regresará nuevamente como el Rey triunfante, a quien todos proclamarán como Señor. Mientras esperamos Su regreso triunfante, podemos vivir para Él como nuevas creaciones, completamente vivas.

Y a medida que nos unimos a Él en el trabajo restaurador de Su reino que continúa hasta hoy, honramos Su nombre como nuestro Rey de reyes y Señor de señores.

Actividad: Realiza un pequeño acto de restauración. Recoge la basura que no sea tuya o dona tus pertenencias descartadas a una tienda de segunda mano.