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Tú y tus hijos

Dios nos da la responsabilidad de criar a nuestros hijos en su temor y amor. Los hijos no solo son una bendición, sino también una oportunidad para reflejar el carácter de Dios en sus vidas a través de nuestra guía y ejemplo.

Deuteronomio 6:6-7 nos llama a enseñar a nuestros hijos en todo momento, integrando la Palabra de Dios en la vida cotidiana. Este proceso va más allá de las palabras; incluye el ejemplo diario de una vida centrada en Cristo. Los padres no solo deben disciplinar, sino también inspirar y motivar a sus hijos, ayudándolos a descubrir su propósito en Dios.

Criar hijos conforme a los principios de Dios implica paciencia, oración constante y una disposición a aprender y crecer junto a ellos. No se trata de imponer reglas rígidas, sino de crear un ambiente de amor, gracia y verdad que les permita florecer en su relación con Dios.

Aplicación práctica:
Busca un momento esta semana para compartir un principio bíblico con tus hijos. Escucha sus inquietudes y ora con ellos sobre sus desafíos y sueños.