Mi Enfoque Es La EternidadMuestra

Las heridas del pasado pueden aprisionarnos, impidiendo nuestro crecimiento espiritual. Pablo nos anima a dejar el pasado atrás y a centrarnos en el premio eterno en Cristo. Para avanzar en nuestra jornada de fe, necesitamos liberar el perdón y seguir adelante, confiando en la gracia de Dios.

Reflexiona sobre una herida del pasado que todavía llevas contigo. Estas heridas pueden crear barreras en nuestra relación con Dios y con los demás, impidiéndonos vivir plenamente el propósito de Dios para nuestras vidas. Pídele a Dios ayuda para liberar el perdón y sanar estas heridas, permitiendo que Su amor y Su paz llenen tu corazón.

Entrega estas heridas a Dios y elige seguir adelante. Puede ser un proceso difícil y prolongado, pero al confiar en la gracia de Dios, Él te dará la fuerza y la capacidad de perdonar y avanzar. Recuerda que el perdón no es solo para el beneficio del otro, sino también para tu propia liberación y crecimiento espiritual.

Oración: Señor, ayúdame a olvidar lo que quedó atrás y a seguir hacia Tu llamado. Que pueda liberar el perdón y encontrar paz en Ti. En el nombre de Jesús, amén.