Cómo hacer feliz a Jesús.

Era un momento muy especial, los discípulos estaban felices de haber experimentado personalmente aquello de predicar, y desatar y activar el poder de Dios.

En ese momento el Señor les habló de la autoridad que tenían y les explicó: “Miren, les he dado autoridad sobre todos los poderes del enemigo; pueden caminar entre serpientes y escorpiones y aplastarlos. Nada les hará daño”. Y luego de hablarles de la autoridad, él les abrió el corazón y les dijo: “Pero no se alegren de que los espíritus malignos los obedezcan; alégrense porque sus nombres están escritos en el cielo”.

Jesús asegura que lo que más le emociona es que los 8 nombres se vayan escribiendo en el cielo. ¡El corazón de Dios está enfocado en la salvación de las personas! La Escritura continúa diciendo que “En esa misma ocasión, Jesús se llenó del gozo del Espíritu Santo y dijo: Oh Padre, Señor del cielo y de la tierra…”. El Señor declaró adoración a Dios. Según la traducción del texto original, Jesús se puso a alabar, Él cantó y danzó de alegría. Lo que más feliz hace al Señor Jesucristo es que su Palabra se predique y que la gente se salve, que ninguno perezca, y que todos procedan al arrepentimiento.

Oremos: Señor, te bendecimos por regalarnos la oportunidad de participar en tu obra. Te damos gracias porque podemos ser felices y hacerte feliz a vos. ¡No hay nada que nos agrade más que darte alegrías! Amén.