El Jesús Que Eligió Acercarse – Inspirado en "The Chosen"

Matrimonio Indivisible

¡Cuando El Dolor No Tiene La Última Palabra!

Entrega El Mando

Dios Te Creó Con Propósito

Mamás Con La Agenda Llena

Huellas en El Polvo: Reflexiones Para Peregrinos

Algo Más Fuerte: Cómo Manejar Los Problemas De La Vida

Encontrando Esperanza en La Oscuridad

<div class="version vid210 iso6393spa" data-vid="210" data-iso6393="spa">
 <div class="book bk1SA">
 <div class="chapter ch13" data-usfm="1SA.13">
 <div class="label">13</div><div class="ms2">Reinado y rechazo de Sa&#250;l (13&#8211;15)</div><div class="s1">Guerra contra los filisteos</div><div class="p"> 1Sa&#250;l era un hombre joven cuando comenz&#243; a reinar, y habiendo reinado algunos a&#241;os sobre Israel 2escogi&#243; a tres mil israelitas: dos mil estaban con &#233;l en Micm&#225;s y en la monta&#241;a de Betel, y otros mil estaban con Jonat&#225;n en Guibe&#225; de Benjam&#237;n. Al resto de la gente la envi&#243; a sus casas. 3Jonat&#225;n derrot&#243; a la guarnici&#243;n filistea que hab&#237;a en Guibe&#225; y los filisteos se enteraron. Entonces Sa&#250;l hizo sonar el cuerno en todo el pa&#237;s para que tambi&#233;n se enteraran los hebreos. 4Y todo Israel se enter&#243; de que Sa&#250;l hab&#237;a derrotado a la guarnici&#243;n filistea acarre&#225;ndose con ello Israel el odio de los filisteos. Entonces la gente se reuni&#243; con Sa&#250;l en Guilgal.</div><div class="p"> 5A su vez, los filisteos se concentraron para luchar contra Israel con tres mil carros, seis mil jinetes y una infanter&#237;a tan numerosa como la arena de las playas. Luego subieron a acampar en Micm&#225;s, al este de Bet-Av&#233;n.#ver 14,1-15. 6Los israelitas, al sentirse acosados, se vieron en peligro y fueron a esconderse en cuevas y cavernas, entre riscos o en s&#243;tanos y aljibes. 7Algunos hebreos cruzaron el Jord&#225;n hacia la regi&#243;n de Gad y Galaad. Sa&#250;l resist&#237;a en Guilgal, mientras toda su tropa estaba acobardada. 8Sa&#250;l esper&#243; siete d&#237;as, el plazo fijado por Samuel, pero Samuel no llegaba a Guilgal y la gente comenzaba a desertar.#10,8. 9Entonces Sa&#250;l orden&#243;:</div><div class="p">&#8212;Traedme el holocausto y los sacrificios de comuni&#243;n.</div><div class="p">Y Sa&#250;l ofreci&#243; el holocausto. 10Cuando terminaba de ofrecerlo, lleg&#243; Samuel, y Sa&#250;l sali&#243; a su encuentro para saludarlo. 11Samuel le pregunt&#243;:</div><div class="p">&#8212;&#191;Qu&#233; has hecho?</div><div class="p">Y Sa&#250;l contest&#243;:</div><div class="p">&#8212;Cuando vi que la gente desertaba, que t&#250; no ven&#237;as en el plazo acordado y que los filisteos se concentraban en Micm&#225;s, 12pens&#233; que los filisteos me iban a atacar en Guilgal sin haber podido aplacar al Se&#241;or, y me vi obligado a ofrecer el holocausto.</div><div class="p"> 13Samuel dijo a Sa&#250;l:</div><div class="p">&#8212;&#161;Has perdido el juicio! Si hubieras guardado el precepto que el Se&#241;or tu Dios te impuso, el Se&#241;or habr&#237;a consolidado para siempre tu reinado sobre Israel.#15,10-26; 28,16-19; Hch 13,22. 14Pero ahora tu reinado no durar&#225;. El Se&#241;or se ha buscado un hombre de su confianza para convertirlo en jefe de su pueblo, puesto que no has cumplido lo que te orden&#243;.</div><div class="p"> 15Y Samuel se puso en camino para subir desde Guilgal hasta Guibe&#225; de Benjam&#237;n.</div><div class="p">Sa&#250;l pas&#243; revista a la gente que le quedaba: eran unos seiscientos. 16Sa&#250;l, su hijo Jonat&#225;n y la gente que los acompa&#241;aba se establecieron en Guibe&#225; de Benjam&#237;n, mientras que los filisteos acamparon en Micm&#225;s. 17Del campamento filisteo sali&#243; un destacamento de castigo dividido en tres patrullas: una se dirigi&#243; hacia Ofr&#225;, hacia la regi&#243;n de Sual; 18otra se dirigi&#243; hacia Bet Jor&#243;n y la tercera se dirigi&#243; hacia la frontera que domina el valle de Sebo&#237;n, hacia el desierto. 19En todo el territorio de Israel no hab&#237;a un solo herrero, pues los filisteos no quer&#237;an que los hebreos forjasen espadas o lanzas. 20Y todos los israelitas ten&#237;an que acudir a los filisteos para aguzar cada uno su reja, su azada, su hacha y su hoz. 21Afilar rejas o azadas costaba dos tercios de siclo y un tercio afilar hachas o arreglar aguijadas. 22Por eso, el d&#237;a del combate ninguno de los que acompa&#241;aban a Sa&#250;l y a Jonat&#225;n ten&#237;an espadas y lanzas. Solo las ten&#237;an Sa&#250;l y su hijo Jonat&#225;n.</div><div class="p"> 23Un destacamento filisteo sali&#243; hacia el paso de Micm&#225;s.</div>
 </div>
 </div>
</div>

<div class="version vid210 iso6393spa" data-vid="210" data-iso6393="spa">
 <div class="book bk1SA">
 <div class="chapter ch15" data-usfm="1SA.15">
 <div class="label">15</div><div class="s1">Guerra contra Amalec</div><div class="p"> 1Cierto d&#237;a Samuel le dijo a Sa&#250;l:</div><div class="p">&#8212;El Se&#241;or me envi&#243; para ungirte como rey de su pueblo Israel. Escucha ahora las palabras del Se&#241;or. 2Esto dice el Se&#241;or del universo: &#171;He decidido pedir cuentas a Amalec&#187; por todo lo que le hizo a Israel, cerr&#225;ndole el paso cuando sub&#237;a de Egipto.#Dt 25,17-19 (ver Ex 17,8-16). 3Por tanto, ataca a Amalec, consagra sin miramientos al exterminio todas sus pertenencias y mata hombres y mujeres, muchachos y beb&#233;s, vacas y ovejas, camellos y asnos.</div><div class="p"> 4Sa&#250;l moviliz&#243; al pueblo, al que pas&#243; revista en Tel&#225;in: hab&#237;a doscientos mil hombres de infanter&#237;a y diez mil hombres de Jud&#225;. 5Luego avanz&#243; hasta la capital de Amalec y se embosc&#243; junto al r&#237;o. 6Entonces mand&#243; decir a los quenitas:</div><div class="p">&#8212;Salid y apartaos de los amalecitas, para que no os confunda con ellos, pues vosotros tratasteis bien a todos los israelitas cuando sub&#237;an de Egipto.</div><div class="p">Y los quenitas se apartaron de Amalec.#Nm 10,29; Jue 1,16. 7Sa&#250;l derrot&#243; a Amalec desde Javil&#225; hasta la entrada de Sur, en la frontera de Egipto. 8Captur&#243; vivo a Agag, rey de Amalec, y extermin&#243; a todo el pueblo a filo de espada. 9Pero Sa&#250;l y el ej&#233;rcito perdonaron la vida a Agag y a las mejores ovejas y vacas, a las terneras y a los corderos, es decir, a todo lo valioso, y no quisieron consagrarlo al exterminio. En cambio s&#237; aniquilaron todas las cosas in&#250;tiles y sin valor.</div><div class="p"> 10El Se&#241;or dirigi&#243; a Samuel este mensaje:</div><div class="p"> 11&#8212;Me arrepiento de haber elegido rey a Sa&#250;l, pues me ha vuelto la espalda y no ha cumplido mis &#243;rdenes.</div><div class="p">Samuel se entristeci&#243; y estuvo suplicando al Se&#241;or toda la noche. 12Por la ma&#241;ana madrug&#243; para ir al encuentro de Sa&#250;l, pero le informaron que Sa&#250;l hab&#237;a ido a Carmel para levantar un monumento, y que luego, dando un rodeo, hab&#237;a bajado a Guilgal. 13Entonces Samuel lleg&#243; adonde estaba Sa&#250;l y este le dijo:</div><div class="p">&#8212;El Se&#241;or te bendiga. He cumplido el encargo del Se&#241;or.</div><div class="p"> 14Pero Samuel le pregunt&#243;:</div><div class="p">&#8212;&#191;Y qu&#233; significan esos balidos que escucho y esos mugidos que estoy oyendo?</div><div class="p"> 15Sa&#250;l le respondi&#243;:</div><div class="p">&#8212;Los han tra&#237;do de Amalec. La gente ha perdonado la vida a las mejores ovejas y vacas, para ofrecerlas en sacrificio al Se&#241;or tu Dios. El resto lo hemos consagrado al exterminio.</div><div class="p"> 16Samuel repuso:</div><div class="p">&#8212;Calla, que te voy a comunicar lo que el Se&#241;or me ha dicho esta noche.</div><div class="p">Sa&#250;l respondi&#243;:</div><div class="p">&#8212;Habla.</div><div class="p"> 17Samuel dijo:</div><div class="p">&#8212;Aunque te consideras insignificante, eres el jefe de las tribus de Israel, pues el Se&#241;or te ha ungido como rey de Israel.#9,21. 18El Se&#241;or te ha enviado a esta campa&#241;a con la orden de consagrar al exterminio a esos amalecitas pecadores y de atacarlos hasta acabar con ellos. 19&#191;Por qu&#233; te has apoderado del bot&#237;n desobedeciendo la orden del Se&#241;or y haciendo lo que el Se&#241;or desaprueba?#13,11-14.</div><div class="p"> 20Sa&#250;l le contest&#243;:</div><div class="p">&#8212;S&#237; que he obedecido la orden del Se&#241;or. He realizado la campa&#241;a que me encomend&#243;, he tra&#237;do a Agag, rey de Amalec, y he consagrado al exterminio a los amalecitas. 21Y si la gente tom&#243; como bot&#237;n las ovejas y vacas, destinadas al exterminio, fue para ofrec&#233;rselas en sacrificio al Se&#241;or tu Dios en Guilgal.</div><div class="p"> 22Samuel respondi&#243;:</div><div class="p">&#8212;&#191;Acaso el Se&#241;or valora m&#225;s los holocaustos y sacrificios que la obediencia a su palabra? Mira, la obediencia vale m&#225;s que el sacrificio y la docilidad m&#225;s que la grasa de carneros.#Os 6,6; Am 5,21-25; Pr 21,3. 23En cambio, la rebeld&#237;a es como el pecado de espiritismo, y la arrogancia, como el delito de idolatr&#237;a. Puesto que has rechazado la palabra del Se&#241;or, &#233;l te rechaza como rey.</div><div class="p"> 24Entonces Sa&#250;l dijo a Samuel:</div><div class="p">&#8212;He pecado, pues he violado el mandato del Se&#241;or y tus palabras, y he obedecido a la gente por miedo. 25Ahora te ruego que me perdones y que me acompa&#241;es para adorar al Se&#241;or.</div><div class="p"> 26Samuel le respondi&#243;:</div><div class="p">&#8212;No te acompa&#241;ar&#233;, pues has rechazado la palabra del Se&#241;or y el Se&#241;or te rechaza como rey de Israel.</div><div class="p"> 27Samuel se dio la vuelta para marcharse, pero Sa&#250;l le agarr&#243; el borde del manto y se lo rompi&#243;. 28Entonces Samuel le dijo:</div><div class="p">&#8212;El Se&#241;or tambi&#233;n te arranca hoy el reino de Israel para d&#225;rselo a otro mejor que t&#250;.#1 Re 11,11. 29Y es que la Gloria de Israel no miente ni se arrepiente, pues no es un ser humano para arrepentirse.#Nm 23,19.</div><div class="p"> 30Sa&#250;l insisti&#243;:</div><div class="p">&#8212;He pecado. Pero ahora te ruego que me rehabilites ante los ancianos del pueblo y ante Israel, y que me acompa&#241;es para adorar al Se&#241;or, tu Dios.</div><div class="p"> 31Samuel volvi&#243; con Sa&#250;l y este ador&#243; al Se&#241;or. 32Luego Samuel orden&#243;:</div><div class="p">&#8212;Traedme a Agag, el rey de Amalec.</div><div class="p">Agag se acerc&#243; a &#233;l confiado pensando que ya hab&#237;a superado el mal trago de la muerte. 33Pero Samuel le dijo:</div><div class="p">&#8212;As&#237; como tu espada dej&#243; a muchas madres sin hijos, ahora tu madre quedar&#225; privada de hijos, igual que ellas.</div><div class="p">Y Samuel descuartiz&#243; a Agag ante el Se&#241;or en Guilgal. 34Luego se march&#243; a Ram&#225; y Sa&#250;l volvi&#243; a su casa de Guibe&#225; de Sa&#250;l. 35Samuel ya no volvi&#243; a ver en su vida a Sa&#250;l, pero sent&#237;a pena por &#233;l, porque el Se&#241;or se hab&#237;a arrepentido de haberlo nombrado rey de Israel.</div>
 </div>
 </div>
</div>

Proyecto Biblia | El Antiguo Testamento en un añoMuestra

Escritura

Acerca de este Plan

Planes relacionados