La adoración: Estudio de los SalmosMuestra

¿Qué dice?

El salmista invita a todo lo que respira a cantar alabanzas al Señor por Su creación, Su compasión, Sus actos poderosos y Su suprema grandeza.

¿Qué significa?

¡Qué magnífico cierre para el concierto de alabanza y oración de las Escrituras! El primer salmo comienza con la bendición de Dios sobre el hombre que medita en Su Palabra. El último salmo termina con el hombre y "todo lo que respira" alabando al Señor. A veces alabar a Dios puede ser tranquilo y reflexivo. Sin embargo, los últimos tres salmos invitan a toda la creación a unirse en un servicio de adoración para alabar a su Creador. Aquellos que conocen a Dios tienen una razón especial para entonar un nuevo canto de alabanza al Señor — un canto de salvación. Él es quien ha lavado sus pecados y castigado a sus enemigos. Es justo alabar a Dios en todo lugar, en cada situación y con cada aliento.

¿Cómo debo responder?

¿Cómo inicias y terminas tu día? ¿Te levantas lleno de temor al pensar en los eventos del día, o recuerdas: "Este es el día que hizo el Señor; nos gozaremos y alegraremos en él"? A Dios le encanta escuchar tus alabanzas mientras te congregas con otros para adorar, pero Él también siente gran placer cuando tu alabanza coincide con tus decisiones y la forma en que vives. Trata de alinear tu día con la estructura de los salmos. Comienza el día meditando en la sabiduría de Dios en las Escrituras; que tus acciones durante el día sean una expresión de cuánto Lo amas, y termina el día mostrando aprecio por quién es Dios y agradeciendo por lo que ha hecho. ¿Te unirás con toda la creación en alabanza al Señor por Su grandeza? ¿Le agradecerás ahora mismo por proveer para tu salvación? Determina alabar al Señor en cada situación que enfrentes con cada aliento hasta el día de tu muerte. Te energizará física, emocional y espiritualmente.