Quien Dices Que Soy - Parte 3Muestra

En los tiempos de la Biblia las vasijas de barro se usaban para guardar comida, las jarras eran para llevar agua, las botellas para colocar el aceite, los cuencos o tazones para comer la comida y los vasos para beber de ellos. Una vez que el barro se coloca en el horno se endurece y es casi irrompible. Nosotros somos como ese barro o arcilla en las manos del alfarero. Dios nos moldea y nos da forma para prepararnos para el propósito que Él tiene en mente. Ireneo de Lyon fue un líder cristiano del s. II, más o menos 200 años después de la muerte y resurrección de Cristo. Esto fue lo que él escribió acerca de ser la obra de Dios: “No eres tú quien da forma a Dios. Es Dios quien te da forma. Si entonces eres obra de Dios espera la Mano del artista que hace todas las cosas a su debido tiempo. Ofrécele tu corazón, suave y dócil y mantén la forma en que el artista te ha modelado. Deja que la arcilla esté húmeda para que no te endurezcas y pierdas la huella de Sus Dedos.” Mientras más tiempo pasamos con el Alfarero la arcilla es moldeada y fortalecida para convertirse después en lo que Dios nos ha diseñado a ser. Nosotros somos su obra maestra, única e invaluable. 

Descubre más en los versículos de hoy acerca de la forma en la que Dios nos ha hecho.