Busca a Dios a través de tu situaciónMuestra

La vida presenta muchos desafíos y, para algunas personas, comienza a una edad temprana. Desde la edad de 5 a 18 años, luché con pensamientos suicidas, ira, depresión y ansiedad. Incluso después de entregar mi corazón a Cristo, seguía luchando con el desánimo. Escuché muchos mensajes sobre la fe y el amor de Dios que me consolaron pero nunca me cambiaron. La realidad era que esos mensajes eran como refuerzos que me ayudaban a pasar la semana siguiente. La oscuridad, la depresión, la ansiedad y mi lucha por vivir y perdonar seguían muy presentes.

A menudo intentaba forzarme a tener fe y analizar mis sufrimientos. No quería ser un cristiano deprimido. Estaba deprimido y era ateo, así que estar deprimido y ser cristiano no tenía sentido. (Puedo hacer mal todo por mí mismo jajaja).

No fue hasta que empecé a buscar a Dios que descubrí que la paz es posible y que habita en su presencia.

La paz de Dios es algo en lo que seguimos madurando bajo la dirección del Espíritu Santo.

Creo que la persona con la que podemos identificarnos cuando se trata de traumas y depresión es Job. Job era un hombre que repetidamente decía que deseaba no haber nacido nunca. La vida le había hecho sentir que no valía la pena vivir. 

¿Alguna vez has pensado que te siguen sucediendo cosas malas? ¿Que no importa lo que hagas o dejes de hacer, la vida te sigue lastimando, humillando? Es en este momento cuando debemos buscar a Dios, aunque no queramos.

Créeme, buscar a Dios no es tan difícil como pensamos. Buscar a Dios, al igual que buscar cualquier cosa, sólo requiere compromiso. Cuando vemos algo difícil, automáticamente nos desanimamos del compromiso.

Empieza a buscar a Dios con la mentalidad de voy a disfrutar de esto, y no con la mentalidad de esto es estricto.

Día: 1

• Adora a primera hora de la mañana y a última hora de la noche. El tiempo depende de ti. Mientras adoras, enfócate en quién es Él.