Rapsodia de Realidades (Diciembre de 2018)Muestra

  

6 Pastor Chris 

Nacido De Nuevo

Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios (Juan 3:3).

En el artículo anterior, estudiamos que el cristiano no es un hombre natural. El hombre natural está sometido a los rudimentos de este mundo: a la derrota, el fracaso, la pobreza y todas las incertidumbres de la vida. El hombre natural está sujeto, sin esperanza alguna, a este mundo malvado. Efesios 2:12 describe la vida de tal persona como una completa tragedia, porque vive en este mundo sin esperanza y sin Dios. ¡Qué terrible!

Si piensas que tal descripción es aplicable a tu persona, has de saber que todo eso puede cambiar ahora mismo. Sí, podrás haber vivido toda tu vida siendo un hombre natural, sometido a la depravación y a las influencias negativas de este mundo natural; pero hoy puedes comenzar una nueva vida, naciendo de nuevo. Jesús dijo que el que no naciere de nuevo no puede escapar de la destrucción y de los peligros de este mundo.

¿Por qué seguir siendo un hombre natural y verte azotado por las tormentas y los desórdenes de este mundo? Solo el que ha nacido de nuevo está desconectado de las tinieblas, del mal y de la muerte. Juan 3:16 dice: "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda...". La muerte, la sepultura y la resurrección de Jesús te desconectan de la potestad de Satanás, y de este mundo de oscuridad y confusión; y te trasladan a Cristo - a la gloriosa libertad de los hijos de Dios.

¡El fracaso, la enfermedad, la pobreza y todo lo negativo del mundo, dejan de ser parte de tu vida cuando naces de nuevo! Y las fuerzas negativas de este mundo no pueden prevalecer contra ti, pues vives a diario en la victoria de Cristo. Y al final de tus días en la tierra, estarás ante el Señor en gloria. Pero esto no sucederá si no naces de nuevo, y sigues siendo un hombre natural.

El hombre natural no puede comprender las realidades del Espíritu de Dios; pero cuando recibes a Cristo en tu corazón y llegas a conocer al Espíritu Santo, Él te revelará el corazón del Padre.

Si no has nacido de nuevo, este es tu momento: dirígete a la Oración de Salvación que hallarás al final de este devocional, y declara las palabras de esa oración con todo tu corazón.

Oración

Querido Padre celestial, te doy gracias por mi hermosa vida en Cristo. Yo crezco a diario en el conocimiento de Cristo y de mi herencia en Él, a fin de alcanzar madurez y servir al Maestro, en el Nombre de Jesús. Amén. 

Estudio Más Amplio

2 Pedro 3:9-10

Tito 2:11-14