Tony Evans enseña sobre bibliologíaMuestra
He asistido a varios funerales donde he escuchado a alguien decir que la funeraria hizo un buen trabajo con el cuerpo. Lo que quieren decir es que la funeraria hizo un buen trabajo embalsamando y limpiando el cuerpo, ajustando rasgos faciales, rasurando o maquillando las caras y finalmente, vistiendo al difunto. Sin embargo, sin importar cuan bueno sea el trabajo del funerario, el cuerpo típicamente solo se ve como una imitación de la persona viva y vibrante que una vez vivió. Es solo una caparazón vacía.
Muchos ven la Biblia de la misma manera. Se ve bien y se presenta bien, pero no está viva. Es solo una caparazón que contiene historias antiguas sobre personas mayores que ya están muertas y enterradas. Sin embargo, ese no es el caso. La Biblia testifica sobre sí misma y está "viva y activa". El término teológico que la Escritura usa para describir el fenómeno "vivo y activo" se llama "inspiración" de la Escritura. La palabra "inspirar" se deriva de la palabra latina inspirare que significa "soplar adentro de algo", y describe el acto físico de soplar dentro de algo. Por lo tanto, el término inspiración no habla de un despertar espiritual, una influencia emocional o un sentimiento animado. En cambo, se refiere al origen de la Escritura. Toda Escritura se origina de Dios mismo.
Muchos eruditos asocian el hecho de soplar la Escritura con el acto de Dios soplando vida en Adán. ¡En ambos casos, la acción de Dios de soplar Su Espíritu resulta en vida! Esta es la razón por la que podemos decir que la Escritura es viva y activa. No solamente comunica la Palabra de Dios. No solo contiene la Palabra de Dios. No solo las convierte en la Palabra de Dios bajo circunstancias específicas. Es la Palabra de Dios. Y es la expresión registrada de la persona de Dios—Su intelecto, emociones y voluntad. La Palabra de Dios viene de Dios y está viva y activa hoy.
¿A qué conclusiones puedes llegar sobre la Escritura si comprendes mejor el término "inspiración"?
Acerca de este Plan
En un partido de futbol, hay un tercer equipo en la cancha—un equipo de oficiales que obtienen su autoridad ejecutando el reglamento. Al igual que la autoridad en un partido de futbol descansa sobre el reglamento que usan los árbitros, la autoridad del reino de Dios descansa sobre Su reglamento, la Biblia. En este plan de lectura de cinco días, el Dr. Tony Evans te presentará la bibliología: el estudio de la Biblia.
More