Peligrosamente influyenteMuestra
Elige las influencias sabiamente
Existe una diferencia entre oír y escuchar. Oír es lo que el cuerpo hace naturalmente. Es la acción de tus oídos que perciben el sonido y luego tu cerebro le da significado. Pero escuchar es opcional. Escuchar requiere enfoque y concentración, en realidad procesas lo que fue dicho.
De la misma manera, existe una diferencia entre influencia y existencia. Vivimos en un mundo caído porque todos hemos pecado. Por eso, siempre habrá gente e influencias que no valen la pena seguir, porque el mundo es peligrosamente influyente. Pero sólo porque algo existe, no tiene que influir. Observa la cultura pop. Podemos aprender de ella pero ciertamente no tenemos que ser como ella.
Podemos desechar toda mala influencia de nuestro mundo. Son tantas que luego quedaríamos sin amigos. Podríamos estar tan desconectados del mundo que perderíamos nuestra influencia en él. Eso nos lleva a una pregunta importante: ¿cómo podemos estar en este mundo pero no ser de él?
Debemos reconocer que existen muchas influencias, pero que solo algunas merecen ser seguidas.
Así que, ¿cómo lo hacemos? Debemos decidir quién o qué nos influencia. Dios nos dió discernimiento y Su Espíritu Santo para ayudarnos a hacerlo.
Filipenses 4:8 NVI dice: Por último, hermanos, consideren bien todo lo verdadero, todo lo respetable, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo digno de admiración, en fin, todo lo que merezca elogio.
Dejemos que el discernimiento decida, nosotros elijamos pensar en lo que es correcto y digno de elogio. Para elegir prudentemente nuestra influencia, debemos filtrar lo bueno de lo malo.
Desafío: ¿Qué influencias tienes que se alinean con Filipenses 4:8? Cómo puedes encontrar más influencias que te motiven a pensar en cosas dignas de elogio?
Acerca de este Plan
Las influencias nos rodean. Pero con tantas voces, ¿cómo elegir sabiamente a quién escuchar? Del mismo modo, estamos llamados a ser influyentes. ¿Pero por dónde empezamos? En este Plan bíblico de 5 días, aprenderemos lo peligrosamente influyente que puede ser el mundo, pero también cómo podemos llegar a serlo nosotros mismos.
More