Relaciones del Reino - Un plan sobre Matrimonio, Noviazgo y SolteríaMuestra

La soltería

La soltería con frecuencia puede ser una fuente de bendición y de dolor al mismo tiempo. También es difícil el no sentir que sólo es una etapa de transición. Podemos sentirnos asustados y en pánico en la soltería, pero este Salmo nos recuerda que debemos ir a Dios y mostrarle nuestros miedos y "confiar en Jehová (Salmo 37:3 RVR1960)". La fe es confianza. Es lo contrario al miedo y el pánico. 

Saber que siempre hay alguien a quien podemos acudir al tomar decisiones es muy útil: "Encomienda a Jehová tu camino" (Salmo 37:5). Esta es la clave de la orientación. Lleva tu decisión a Dios, pídele que actúe y confía en Él. 

Confiar en Dios en nuestras decisiones es un proceso sencillo de tres partes. Primero, confía la decisión a Dios en oración, pidiéndole que abra las puertas correctas para ti, y que cierre las incorrectas. Segundo, confía en que Él está en control. Tercero, espera con fe a que Él actúe mientras tú sigues tu "camino", esperando Su voluntad. 

En el libro de Oseas, vemos que Dios también anhela que vivas una relación con Él, tan cercana como la de un esposo y una esposa. Él dice: "Yo la atraeré" (Oseas 2:14). Él la lleva al desierto (el lugar donde frecuentemente se escucha la voz de Dios) y le habla con ternura. "En aquel tiempo, dice Jehová, me llamarás 'mi marido'.... te desposaré conmigo para siempre" (Oseas 2:16,19).

Esto anticipa la relación de Jesús y Su iglesia. Dios promete una nueva relación de amor entre Él y Su pueblo (Oseas 2:19–20). Ellos conocerán (reconocerán) al Señor. Tanto si estás soltero/a o no, esta relación con Dios es la relación más profunda que nosotros podemos esperar encender, mantener y alimentar.

En la lectura del Evangelio de Mateo, Jesús habla de tres tipos de soltería. Primero, la de nacimiento: "Algunos nacen incapacitados para el matrimonio" (Mateo 19:12). Segundo, la soltería involuntaria: "A otros los incapacitan los demás convirtiéndolos en eunucos hechos así por los hombres" (Mateo 19:12). Tercero, la soltería voluntaria: "y otros renuncian al matrimonio a fin de estar más disponibles para el servicio del reino de los cielos" (Mateo 19:12). La soltería puede ser temporal o permanente, pero nunca se considera en el Nuevo Testamento como un “Plan B”. Tanto el matrimonio como la soltería son llamados supremos y, según el Nuevo Testamento, ambos tienen ventajas y desventajas. 

Que hoy, mientras leamos estos pasajes, podamos comprender que Dios busca nuestro afecto, y que seamos llenos de Su Espíritu eterno y amoroso, que hace que esta relación sea posible a través de Jesús.