Oswald Chambers: Paz: la vida en el EspírituMuestra

Satanás nunca es representado en la Biblia como el culpable de hacer las cosas incorrectas: él es un ser incorrecto. Los hombres son responsables de hacer las cosas incorrectas y lo hacen por la naturaleza incorrecta en ellos. La raíz moral de nuestra naturaleza nos lleva a culpar a Satanás, a pesar de qué perfectamente sabemos que es a nosotros mismos a quienes deberíamos de culpar; la verdadera culpa por los pecados recae en la naturaleza incorrecta que yace en nosotros.

En todo caso, Satanás está tan molesto como lo está el Espíritu Santo cuando el hombre cae en pecados externos, solamente que es por una razón diferente. Cuando los hombres caen en pecados externos y frustran sus vidas, Satanás sabe perfectamente que ellos querrán otro Rey, un Salvador y Libertador. En la medida que Satanás pueda mantener a los hombres en paz, unidad y armonía fuera de la presencia de Dios, lo hará. (Ver Lucas 11:21-22)

Preguntas para reflexionar: ¿A quién culpo de mis pecados? ¿Qué gana Satanás si yo lidero una vida íntegra y moral? ¿Qué pierde si me equivoco tanto que reconozco que mi necesidad de paz va más allá de mis propios esfuerzos?

Citas tomadas de Biblical Psychology, © Discovery House Publishers