MATEO 26:30-35
MATEO 26:30-35 La Palabra (versión española) (BLP)
Cantaron después el himno y salieron hacia el monte de los Olivos. Jesús les dijo entonces: —Esta noche todos me abandonaréis, porque así lo dicen las Escrituras: Heriré al pastor y se dispersarán las ovejas del rebaño. Pero después de mi resurrección iré antes que vosotros a Galilea. Pedro le contestó: —¡Aunque todos te abandonen, yo no te abandonaré! Jesús insistió: —Te aseguro que esta misma noche, antes de que cante el gallo, tú me habrás negado tres veces. Pedro insistió: —¡Yo no te negaré, aunque tenga que morir contigo! Y lo mismo decían los otros discípulos.
MATEO 26:30-35 Reina Valera 2020 (RV2020)
Después de haber cantado el himno, salieron hacia el monte de los Olivos. Entonces Jesús les dijo: —Todos vosotros os escandalizaréis de mí esta noche, pues escrito está: Heriré al pastor y se dispersarán las ovejas del rebaño . Pero después de que haya resucitado, iré delante de vosotros a Galilea. Replicó Pedro: —Aunque todos te fallen, yo nunca te fallaré. Jesús le dijo: —Te aseguro que esta noche, antes que el gallo cante, me negarás tres veces. Pedro insistió: —Aunque tenga que morir contigo, no te negaré. Y todos los discípulos dijeron lo mismo.
MATEO 26:30-35 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Después de cantar los salmos se fueron al monte de los Olivos. Y Jesús les dijo: –Esta noche, todos vais a perder vuestra confianza en mí. Así lo dicen las Escrituras: ‘Mataré al pastor y se dispersarán las ovejas.’ Pero cuando resucite, iré a Galilea antes que vosotros. Pedro le contestó: –Aunque todos pierdan su confianza en ti, yo no la perderé. Jesús le dijo: –Te aseguro que esta misma noche, antes que cante el gallo, me negarás tres veces. Pedro afirmó: –Aunque tenga que morir contigo, no te negaré. Y todos los discípulos dijeron lo mismo.
MATEO 26:30-35 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Después de cantar los salmos, salieron al monte de los Olivos. ―Esta misma noche —les dijo Jesús— todos vosotros me abandonaréis, porque está escrito: »“Heriré al pastor, y se dispersarán las ovejas del rebaño”. Pero, después de que yo haya resucitado, iré delante de vosotros a Galilea». ―Aunque todos te abandonen —declaró Pedro—, yo jamás lo haré. ―Te aseguro —le contestó Jesús— que esta misma noche, antes de que cante el gallo, me negarás tres veces. ―Aunque tenga que morir contigo —insistió Pedro—, jamás te negaré. Y los demás discípulos dijeron lo mismo.