LEVÍTICO 25:1-7
LEVÍTICO 25:1-7 La Palabra (versión española) (BLP)
El Señor se dirigió a Moisés en el monte Sinaí y le dijo: —Habla a los israelitas y diles: Cuando hayáis entrado en la tierra que yo os entrego, la tierra deberá disfrutar de un tiempo de descanso en honor del Señor. Seis años sembrarás tu campo, y seis años podarás tu viña y recogerás su producto. Pero el séptimo año la tierra disfrutará de descanso completo en honor del Señor: no sembrarás tu campo, ni podarás tu viña. No cosecharás los rebrotes de la última siega, ni vendimiarás las uvas que pueda producir tu viñedo; será un año de descanso para la tierra. Lo que produzca espontáneamente la tierra en este año de descanso os servirá de alimento a ti, a tu siervo, a tu sierva, a tu criado y al extranjero que viva contigo; también a tu ganado y a los animales que haya en tu tierra, les servirá de alimento todo lo que ella produzca.
LEVÍTICO 25:1-7 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
El Señor se dirigió a Moisés en el monte Sinaí, y le dijo: “Diles esto a los israelitas: Cuando hayáis entrado en la tierra que os voy a dar, la tierra deberá tener reposo en honor del Señor. Podréis sembrar vuestros campos durante seis años. También durante seis años podréis podar vuestros viñedos y recoger sus frutos, pero el séptimo año será de completo reposo de la tierra en honor del Señor; no sembréis ese año vuestros campos ni podéis vuestros viñedos. Tampoco seguéis el trigo que nazca por sí mismo después de la última cosecha, ni recojáis las uvas de vuestro viñedo no podado; la tierra debe tener reposo completo. Lo que la tierra produzca por sí misma durante su reposo, alcanzará para que comáis vosotros, vuestros siervos y vuestras siervas, los trabajadores y extranjeros que vivan con vosotros, y también vuestros ganados y los animales salvajes del país. Todo lo que la tierra produzca os servirá de alimento.
LEVÍTICO 25:1-7 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
En el monte Sinaí, el SEÑOR le ordenó a Moisés que les dijera a los israelitas: «Cuando hayáis entrado en la tierra que os voy a dar, la tierra misma deberá observar un año de reposo en honor al SEÑOR. Durante seis años sembrarás tus campos, podarás tus viñas y cosecharás sus productos; pero, llegado el séptimo año, la tierra gozará de un año de reposo en honor al SEÑOR. No sembrarás tus campos ni podarás tus viñas; no segarás lo que haya brotado por sí mismo ni vendimiarás las uvas de tus viñas no cultivadas. La tierra gozará de un año completo de reposo. Sin embargo, de todo lo que la tierra produzca durante ese año sabático, podréis comer no solo tú, sino también tu siervo y tu sierva, el jornalero y el residente transitorio entre vosotros. También podrán alimentarse tu ganado y los animales que haya en el país. Todo lo que la tierra produzca ese año será solo para el consumo diario.