JUAN 18:1-8
JUAN 18:1-8 Reina Valera 2020 (RV2020)
Dichas estas cosas, Jesús salió con sus discípulos y pasó al otro lado del torrente Cedrón. Había allí un huerto y entraron en él. Judas, el que lo iba a entregar, también conocía aquel lugar porque muchas veces Jesús se había reunido allí con sus discípulos. Así, pues, Judas, habiendo tomado una compañía de soldados y guardias de los principales sacerdotes y de los fariseos, se dirigió a ese lugar con linternas, antorchas y armas. Pero Jesús, que sabía todo lo que iba a sucederle, salió a su encuentro y les preguntó: —¿A quién buscáis? Le repitieron: —A Jesús nazareno. Jesús les dijo: —Yo soy. Con ellos estaba también Judas, el que lo iba a entregar. Al decirles Jesús: «Yo soy», ellos retrocedieron y cayeron a tierra. Jesús les preguntó otra vez: —¿A quién buscáis? Ellos respondieron: —A Jesús nazareno. Jesús les dijo: —Os he dicho que soy yo. Si me buscáis a mí, dejad que estos se vayan.
JUAN 18:1-8 La Palabra (versión española) (BLP)
Dicho esto, salió Jesús acompañado de sus discípulos, pasaron al otro lado del torrente Cedrón y entraron en un huerto. Este lugar era bien conocido de Judas, el traidor, ya que Jesús acudía frecuentemente a él con sus discípulos. Así pues, Judas tomó consigo un destacamento de soldados y guardias puestos a su disposición por los jefes de los sacerdotes y los fariseos, y se dirigió a aquel lugar. Además de las armas, llevaban antorchas y faroles. Jesús, que sabía perfectamente todo lo que iba a sucederle, salió a su encuentro y les preguntó: —¿A quién buscáis? Ellos le contestaron: —A Jesús de Nazaret. Jesús les dijo: —Yo soy. Judas, el traidor, estaba con ellos. Al decirles Jesús: «Yo soy», se echaron atrás y cayeron en tierra. Jesús les preguntó otra vez: —¿A quién buscáis? Ellos repitieron: —A Jesús de Nazaret. Jesús les dijo: —Ya os he dicho que soy yo. Por tanto, si me buscáis a mí, dejad que estos se vayan.
JUAN 18:1-8 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
Después de decir estas cosas, Jesús pasó con sus discípulos al otro lado del arroyo de Cedrón, donde había un huerto en el que entró Jesús con ellos. También Judas, el que le traicionaba, conocía el lugar, porque muchas veces se había reunido allí Jesús con sus discípulos. Así que Judas se presentó con una tropa de soldados y con algunos guardias del templo enviados por los jefes de los sacerdotes y por los fariseos. Iban armados y llevaban lámparas y antorchas. Pero como Jesús ya sabía todo lo que había de pasarle, salió a su encuentro y les preguntó: –¿A quién buscáis? –A Jesús de Nazaret –le contestaron. Dijo Jesús: –Yo soy. Judas, el que le traicionaba, estaba también allí con ellos. Cuando Jesús les dijo: “Yo soy”, se echaron atrás y cayeron al suelo. Jesús volvió a preguntarles: –¿A quién buscáis? Repitieron: –A Jesús de Nazaret. Jesús les dijo: –Ya os he dicho que soy yo. Si me buscáis a mí, dejad que los demás se vayan.
JUAN 18:1-8 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
Cuando Jesús terminó de orar, salió con sus discípulos y cruzó el arroyo de Cedrón. Al otro lado había un huerto en el que entró con sus discípulos. También Judas, el que lo traicionaba, conocía aquel lugar, porque muchas veces Jesús se había reunido allí con sus discípulos. Así que Judas llegó al huerto, a la cabeza de un destacamento de soldados y guardias de los jefes de los sacerdotes y de los fariseos. Llevaban antorchas, lámparas y armas. Jesús, que sabía todo lo que le iba a suceder, les salió al encuentro. ―¿A quién buscáis? —les preguntó. ―A Jesús de Nazaret —contestaron. ―Yo soy. Judas, el traidor, estaba con ellos. Cuando Jesús les dijo: «Yo soy», dieron un paso atrás y se desplomaron. ―¿A quién buscáis? —volvió a preguntarles Jesús. ―A Jesús de Nazaret —repitieron. ―Ya os dije que yo soy. Si es a mí a quien buscáis, dejad que estos se vayan.