ISAÍAS 29:1-8
ISAÍAS 29:1-8 Reina Valera 2020 (RV2020)
¡Ay de Ariel, de Ariel, la ciudad donde acampó David! Añadid un año a otro, y que las fiestas sigan su curso. Mas yo pondré a Ariel en aprietos, y habrá desconsuelo y tristeza. Será para mí como ariel. Porque acamparé contra ti, a tu alrededor; te sitiaré con máquinas de asedio y levantaré contra ti baluartes. Entonces serás derribada y hablarás desde la tierra. Tus palabras brotarán desde el polvo; tu voz, desde la tierra, resonará como la de un fantasma, y tus palabras apenas serán un susurro desde el polvo. La muchedumbre de tus enemigos será como polvo menudo, y la multitud de los fuertes como tamo que pasa. Acontecerá repentinamente, en un momento. Por el Señor de los ejércitos serás visitada con truenos, con terremotos y con gran ruido, con torbellino y tempestad, y con llama de fuego consumidor. Y será como un sueño de visión nocturna la multitud de todas las naciones que pelean contra Ariel, y todos los que pelean contra ella y su fortaleza, y los que la ponen en aprietos. Les sucederá como al que tiene hambre y sueña: le parece que come, pero cuando despierta, su estómago está vacío; o como al que tiene sed y sueña: le parece que bebe, pero cuando despierta, se halla cansado y sediento. Así será la multitud de todas las naciones que pelean contra el monte de Sion.
ISAÍAS 29:1-8 La Palabra (versión española) (BLP)
¡Ay, Ariel, Ariel, ciudad sitiada por David! Dejad que pasen los años, que ruede el ciclo festivo; entonces asediaré a Ariel, habrá lloros y lamentos. Serás para mí un ariel; te asediaré como hizo David, te estrecharé con trincheras, te atacaré con baluartes. Hablarás abatida desde el suelo, desde el polvo sonarán tus palabras: tu voz fantasmal desde el suelo, tu palabra mortecina desde el polvo. El tropel de los enemigos será numeroso lo mismo que el polvo; el tropel de los agresores será lo mismo que tamo aventado. Pero rápido, de repente intervendrá el Señor del universo con trueno, temblor y estruendo, con vendaval, tempestad y llama devoradora. Pasará como un sueño o visión nocturna el tropel de las naciones que atacan a Ariel: los que la atacan, la cercan y la asedian. Como cuando sueña el hambriento que come y se despierta con la boca vacía; como cuando sueña el sediento que bebe y se despierta con la boca reseca: eso le ocurrirá al tropel de naciones que atacan al monte Sion.
ISAÍAS 29:1-8 Dios Habla Hoy Versión Española (DHHE)
¡Ay de Ariel, Ariel, la ciudad donde acampó David! Que pasen algunos años siguiendo su curso las fiestas, y yo pondré a Ariel en apuros, y habrá llanto y gemidos. La ciudad será para mí realmente como Ariel. Enviaré mi ejército para que te rodee, pondré un cerco de fortalezas en tu derredor y levantaré trincheras para atacarte. Quedarás humillada, tendida en el suelo; tu voz parecerá la de un fantasma; tus palabras sonarán como un susurro. Pero de pronto, en un instante, el Señor todopoderoso castigará a tus enemigos con truenos, terremotos, gran estruendo, tormenta, tempestad e incendios destructores. Tus innumerables enemigos quedarán hechos polvo fino; tus muchos perseguidores serán arrastrados como paja. Todos esos pueblos incontables que hacen la guerra a Ariel, todos los que la combaten y atacan sus fortificaciones, los mismos que la oprimen serán como un sueño o una visión nocturna. Será como cuando un hambriento sueña y cree que está comiendo, pero luego se despierta con el estómago vacío; o como cuando un sediento sueña y cree que está bebiendo, pero luego se despierta sediento y reseca la garganta. Así sucederá con todos esos innumerables pueblos que atacan el monte Sión.
ISAÍAS 29:1-8 Nueva Versión Internacional - Castellano (NVI)
¡Ay, Ariel, Ariel, ciudad donde acampó David! Añadid a un año otro año más, y que prosiga el ciclo de las fiestas. Pero a Ariel la sitiaré; habrá llanto y lamento, y será para mí como un brasero del altar. Acamparé contra ti, y te rodearé; te cercaré con empalizadas, y levantaré contra ti torres de asalto. Humillada, desde el suelo elevarás tu voz; tu palabra apenas se levantará del polvo. Saldrá tu voz de la tierra como si fuera la de un fantasma; tu palabra, desde el polvo, apenas será un susurro. Pero la multitud de tus enemigos quedará hecha polvo fino, y la multitud de despiadados será como la paja que se lleva el viento. De repente, en un instante, vendrá contra ti el SEÑOR Todopoderoso; vendrá con truenos, terremotos y gran estruendo, vendrá con una violenta tormenta y con devoradoras llamas de fuego. La multitud de todas las naciones que batallan contra Ariel, todos los que luchan contra ella y contra su fortaleza, aquellos que la asedian, serán como un sueño, como una visión nocturna. Como el hambriento que sueña que está comiendo, pero despierta y aún tiene hambre; como el sediento que sueña que está bebiendo, pero despierta y la sed le reseca la garganta. Así sucederá con la multitud de todas las naciones que luchan contra el monte Sión.