Logo de YouVersion
Icono de búsqueda

ROMANOS 14:1-12

ROMANOS 14:1-12 DHHE

Recibid bien al que es débil en la fe y no entréis en dicusiones con él. Por ejemplo, hay quienes piensan que pueden comer de todo, mientras otros, que son débiles en la fe, solamente comen verduras. Pues bien, el que come de todo no debe menospreciar al que no come ciertas cosas; y el que no come ciertas cosas no debe criticar al que come de todo, pues Dios también le ha aceptado. ¿Quién eres tú para criticar al servidor de otro? Si queda bien o queda mal es asunto de su propio amo. Pero quedará bien, porque el Señor tiene poder para hacerle quedar bien. Asimismo hay quienes dan más importancia a un día que a otro, y hay quienes piensan que todos los días son iguales. Cada uno debe estar convencido de lo que cree. El que guarda un determinado día, para honrar al Señor lo guarda. El que come de todo, para honrar al Señor lo come, y da gracias a Dios; y el que no come ciertas cosas, para honrar al Señor deja de comerlas, y también da gracias a Dios. Ninguno de nosotros vive para sí mismo ni muere para sí mismo. Si vivimos, para el Señor vivimos; y si morimos, para el Señor morimos. De manera que, así en la vida como en la muerte, del Señor somos. Para eso murió Cristo y volvió a la vida: para ser Señor tanto de los muertos como de los vivos. ¿Por qué, entonces, criticas a tu hermano? ¿O por qué lo desprecias? Todos tendremos que presentarnos delante de Dios para que él nos juzgue. Porque la Escritura dice: “Juro por mi vida, dice el Señor, que ante mí todos doblarán la rodilla y todos alabarán a Dios.” Así pues, cada uno de nosotros tendrá que dar cuenta de sí mismo a Dios.