JUAN 6:5-14
JUAN 6:5-14 DHHE
Al levantar la vista y ver la mucha gente que le seguía, Jesús dijo a Felipe: –¿Dónde vamos a comprar comida para toda esta gente? Pero lo dijo por ver qué contestaría Felipe, porque Jesús mismo sabía bien lo que había de hacer. Felipe le respondió: –Ni siquiera doscientos denarios de pan bastarían para que cada uno recibiese un poco. Entonces otro de sus discípulos, Andrés, el hermano de Simón Pedro, le dijo: –Aquí hay un niño que tiene cinco panes de cebada y dos peces, pero ¿qué es esto para tanta gente? Jesús respondió: –Haced que todos se sienten. Había mucha hierba en aquel lugar, y se sentaron. Eran unos cinco mil hombres. Jesús tomó en sus manos los panes, y después de dar gracias a Dios los repartió entre los que estaban sentados. Hizo lo mismo con los peces, dándoles todo lo que querían. Cuando estuvieron satisfechos, Jesús dijo a sus discípulos: –Recoged los trozos sobrantes, para que no se desperdicie nada. Ellos los recogieron, y llenaron doce canastas con los trozos que habían sobrado de los cinco panes de cebada. La gente, al ver esta señal milagrosa hecha por Jesús, decía: –Verdaderamente este es el profeta que había de venir al mundo.