SALMOS 42:1-5
SALMOS 42:1-5 RV2020
Como el ciervo brama por las corrientes de las aguas, así clama por ti, mi Dios, el alma mía. Mi alma tiene sed de Dios, del Dios vivo. ¿Cuándo vendré y me presentaré delante de Dios? Fueron mis lágrimas mi pan de día y de noche, mientras me dicen todos los días: «¿Dónde está tu Dios?». Me acuerdo de estas cosas y desahogo mi alma conmigo, de cómo yo iba con la multitud y la conducía hasta la casa de Dios, entre voces de alegría y de alabanza del pueblo en fiesta. ¿Por qué te abates, alma mía, y te turbas dentro de mí? Espera en Dios, porque aún he de alabarle, ¡salvación mía y Dios mío!