FILEMÓN 1:4-16
FILEMÓN 1:4-16 RV2020
En mis oraciones me acuerdo siempre de ti y doy gracias a Dios al oír hablar de tu amor y tu fe hacia el Señor Jesús y hacia todos los creyentes. Y pido a Dios que la participación de tu fe sea eficaz en el conocimiento de todo el bien que está en vosotros por Cristo Jesús. Tu amor, hermano mío, me ha llenado de gran gozo y consolación, porque gracias a ti han sido confortados los corazones de los creyentes. Por eso, aunque tengo mucha libertad en Cristo para ordenarte lo que conviene, prefiero rogártelo y apelar a tu amor. Yo, Pablo, ya anciano, y ahora, además, preso por causa de Jesucristo, te ruego por mi hijo Onésimo, a quien engendré en mis prisiones. Él, en otro tiempo te fue inútil, pero ahora a ti y a mí nos es útil. Te lo envío de nuevo. Tú, pues, recíbelo como a mí mismo. Yo quisiera retenerlo conmigo, para que en lugar tuyo me sirviera en mis prisiones por causa del evangelio. Pero nada quise hacer sin tu consentimiento, para que tu favor no sea por obligación, sino por tu propia voluntad. Tal vez por eso Onésimo se alejó de ti por algún tiempo, para que ahora lo recibas para siempre, no ya como esclavo, sino como más que esclavo, como hermano amado, mayormente para mí, pero cuánto más para ti, tanto en la carne como en el Señor.