GÉNESIS 42:1-20
GÉNESIS 42:1-20 RV2020
Al saber Jacob que en Egipto había alimentos, dijo a sus hijos: —¿Por qué os estáis ahí mirando? Yo he oído que hay víveres en Egipto; descended allá y comprad para nosotros, para que podamos vivir y no muramos. Descendieron los diez hermanos de José a comprar trigo en Egipto. Pero Jacob no envió a Benjamín, hermano de José, con sus hermanos, porque dijo: «No sea que le acontezca algún desastre». Fueron, pues, los hijos de Israel entre los que iban a comprar, porque había hambre en la tierra de Canaán. José era el señor de la tierra, quien le vendía trigo a todo el mundo. Cuando llegaron los hermanos de José, se inclinaron a él rostro en tierra. José los reconoció en cuanto los vio; pero hizo como que no los conocía, y les preguntó con dureza: —¿De dónde habéis venido? Ellos respondieron: —De la tierra de Canaán, para comprar alimentos. Reconoció, pues, José a sus hermanos, pero ellos no lo reconocieron. Entonces se acordó José de los sueños que había tenido acerca de ellos, y les dijo: —Vosotros sois espías y habéis venido para estudiar las zonas desguarnecidas del país. —No, señor nuestro —respondieron ellos—, sino que tus siervos han venido a comprar alimentos. Todos nosotros somos hijos del mismo padre y somos hombres honrados; tus siervos nunca han sido espías. Pero José les replicó: —No; habéis venido a estudiar las zonas vulnerables del país. —Tus siervos somos doce hermanos —respondieron ellos—, hijos de un hombre de la tierra de Canaán. El menor está hoy con nuestro padre y otro ha desaparecido. Y José les dijo: —Eso es lo que os he dicho al afirmar que sois espías. En esto seréis probados: ¡Por vida de Faraón, que no saldréis de aquí hasta que vuestro hermano menor venga! Enviad a uno de vosotros para que traiga a vuestro hermano, y vosotros quedad presos. Así probaréis vuestras palabras y si habéis dicho la verdad. Porque si no es así, ¡por la vida de Faraón, que sois espías! Entonces José los puso a todos en la cárcel durante tres días. Al tercer día les dijo José: —Haced esto y vivid: Yo temo a Dios. Si sois hombres honrados, uno de vuestros hermanos se quedará en la cárcel, mientras los demás vais a llevar el alimento para remediar el hambre de vuestra familia. Pero traeréis a vuestro hermano menor; así serán verificadas vuestras palabras y no moriréis. Ellos lo hicieron así